Lo que pasó.

914 84 9
                                    

21 de marzo, 1986

Normalmente rechazaría la oferta y seguiría siendo una chica sana que no toca ni un cigarro.Pero debido a las circunstancias no creo que pueda alucinar más, además de que ya estaba pagado, así que acepté, me vendría bien para despistarme un poco.

—¿Qué hago con esto?–Le pregunto cuando me da la cajita azul rellena de ketamina.

—Normalmente haces una línea y esnifas pero si te la quieres fumar.

Abro la caja y echo una buena cantidad a la superficie de la barca, antes de hacer la línea Eddie ya está a mi lado preparado para corregirme.

—Yo que tú no me metería tanta cantidad a la primera.Vamos a partirlo a la mitad.

Agarra la tapadera de la caja azul y poco a poco lo divide en dos cantidades y forma dos líneas.

—A la de 3 esnifamos de derecha a izquierda, a la vez, ¿Te parece?

Asiento con nerviosismo, es la primera vez que lo hago y parezco incluso tranquila, o eso siento yo, simplemente me sudan las manos.

Acerco la cabeza a la superficie y a la cuenta de tres hago el movimiento, noto como el polvo sube por mi nariz y toso, es algo incómodo pero bastante satisfactorio, es como un subidón de adrenalina, siento la necesidad de rascarme la nariz todo el tiempo pero no lo hago, por lo menos, no ahora.

ఌ︎

Me encuentro con la espalda en el suelo del bote y las piernas para arriba y apoyadas en la superficie—como si mi cuerpo formará una L— donde hace unos diez minutos me había tomado esa raya.Eddie está a mi lado, pero claramente, menos afectado.

—Te ha subido rápido, ¿Eh?

—Joder, noto como si estuviera flotando, ¿Me ves flotando tú?

—No te veo con los pies en la tierra precisamente.

Me río de su comentario, aunque no lo entienda, en este punto todo me parece gracioso, incluso cuando muevo mis pies de lado a lado.

—Dime la verdad, Cunnigham.Si no le hubiera pasado eso a tu hermana, ¿Hubierais vuelto a hablar conmigo?

—No lo sé, he perdido el rumbo, no se lo que estoy haciendo ahora y no voy a saber lo que voy a hacer después.

22 marzo, 1986
Max Mayfield

—¿Las Cunnighams?¿Segura que eran ellas?–.Me pregunta Dustin después de contarle mi teoría y lo que he visto.

—Sí, Chrisssy llevaba el uniforme de animadora, como cuando las vi con Eddie.

—¿Se lo has dicho a la poli?

—No.No, pero no seré la única que los vio juntos.Daban el cante.

—¿El bicho raro de Eddie con Chrissy, la animadora y Clarisse, la de último año?

—Exacto.Aún no lo han dicho en las noticias, pero Eddie será el principal sospechoso.

—Eso es una locura.No ha sido Eddie. Ni hablar–.Hace una pausa para mirarme a los ojos y vuelve a hablar más fuerte–.Ni hablar.

—Bueno pero no podemos descartarlo.

—Sí.

—Dustin–.Le pido porfavor que razone tres personas en una casa, una muerta y una desaparecida, no lo veo bien para Eddie, él es el único que estaba con ellas.

Verano del 86;Eddie MunsonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora