-Mia no puedo respirar.- digo jadeando cuando vuelve a tirar de los cordones de corset.
-Unos milímetros mas.- dice con dientes apretados.
-Vas a matar a mi mamá antes de que pueda tocar el altar.- dice Gemma mirando con desaprobación a Mia.
-Tu mamá tendría que haber seguido al pie de la letra la dieta.
Mi bella hija de cinco años vertida con un hermoso vestido color violeta claro cruza sus bracitos y suspira enojada.
-Ya esta.- dice soltándome por fin.
Intento respirar y me sorprendo al ver que puedo. Me giro para quedar frente al enorme espejo que hay en la habitación y me quedo sin aire al verme, el enorme vestido blanco con pequeñas rosas de tul color violeta decoran distintas partes de la falta y la delicada cinta violeta que rodea mi cintura terminando en un elegante y bonito moño en mi espalda, mi piel se ve pálida y delicada, limpia y fresca.
-No llores que se te arruinada el maquillaje.- me riñe Mia.
-Eh esperado tres años para este día, tengo derecho a llorar un poco.- digo pasando la mano por el corset decorado con pequeñas piedras brillantes que le dan un toque delicado.
-Por eso no debemos retrasarnos.- dice Laura entrando a la habitación con Danka.
Las niñas comienzan a presumir sus vertidos a pesar de que están vestidas iguales.
-Samuel esta que camina por las paredes.- dice ayudándome a colocarme los zapatos.
-No es el único.- digo aceptando una copa de agua que me pasa Mia.
La puerta se abre y entra Eva con su enorme vientre de embarazada, felizmente embarazada de seis meses espera un varón. Julian esta mas que ansioso y asustado al igual que ella.
-Niñas vamos y dejemos que mamá termine de prepararse.
Danka sale corriendo de la habitación pero Gemm se acerca a mi, hace que me agache para que quede a su altura.
-¿Que pasa?.- digo al ver su sonrisa.
-Estas muy linda mami, pareces una princesa.- sonrió.
-Tu eres la princesa aquí,- dejo un beso en su frente- ve con Danka y Sam y dile a papá que pronto estaré con él.
Sonríe mostrando las adorables ventanitas que tiene por la falta de algunos dientes y sale dando saltos y riendo.
-¿Cuanto tiempo nos queda?.- dice Mia terminando de ajustar el velo que se agarra en el moño de mi cabello.
-Unos cinco minutos.- dice Laura alisando las capas de la falda del vestido.
¡¡Cinco minutos!!, dentro de cinco minutos voy a estar entrando del brazo de mi tío hacia el altar donde me espera mi futuro marido.
Marido...
Quien habría dicho que la chica Wild algún día se casaría, que tendría una familia y seria feliz.
Pasaron siete años desde que conocí a Samuel y él dio a mi vida un giro maravilloso. El hecho de que haya sido una relación prohibida insto a que lo desee mas y, de no haber sido por eso, jamas me habría dado cuenta de que él era el indicado, que él era el hombre y el amor de mi vida. Me dio a dos hermosos hijos y me hace la mujer mas feliz cada día que paso junto a él.
Siento como me comienzan a temblar las manos, ¡MALDITA SEA ME VOY A CASAR!.
No tengo tiempo de entrar en pánico porque mi tío entra en la habitación.
ESTÁS LEYENDO
Aprender a perdonar.
Fiksi PenggemarMuchas veces lo lazos de familia arruinan nuestra vida... Luego de caer totalmente enamorada de su profesor pasaron muchas cosas, su pasado intento interferir pero lo supero. Felizmente casada y con dos hijos la familia De Luque esta totalmente en...