Capitulo 46

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- Kate

-¿Qué carajos? -. hablé frunciendo el ceño, me removí en el suelo, la espalda me dolía como los mil demonios, la cabeza me palpitaba horrible ¿Qué pasó anoche?

Observé a mi alrededor, con los ojos entre cerrados debido a la luz natural que se emanaba... ¡¿LUZ NATURAL?!.

-¡Yelena!... -. susurré llevando mis manos a mi frente y cabello, estaba tendida en el piso de la habitación de la casona de Kathia -No, no, no... -. susurré rápidamente mientras intentaba pararme del incómodo lugar, no traía zapatos ni chaqueta ¿Qué carajos había ocurrido anoche?

-¿Qué ocurre? -. gruñó Kathia, quien yacía a mi lado, en las mismas condiciones que yo, volteó a mirarme atenta mientras intentaba colocar mis zapatos de forma rápida -¿A dónde vas?  -.

-A mi apartamento -. deslicé mi chaqueta por mis brazos mientras que al mismo tiempo intentaba recordar que fue lo que había pasado, pero todo me era borroso.

-Te llevo -. habló rápidamente -Sobre anoche... -. habló pero la interrumpí. 

-Después hablaremos de aquello -. hablé, ella asintió sin discutir y se cambió, no había tenido tiempo de verme en un espejo pero Kathia se ve decente, espero verme igual.

Salimos de la casona, iba a paso rápido, el dolor de mi cuerpo se incrementaba con cada paso, nos subimos a su auto, rápidamente me coloque en el asiento del copiloto mientras observaba como Kathia rodeaba el auto para sentarse a mi lado. Tomé mi teléfono y lo encendí, en la gran pantalla se iluminó con "13 llamadas perdidas de Mia🤍" "1 mensaje de Mia🤍" "24 llamadas de Sharon."

Las últimas me eran indiferentes, decidí abrir el mensaje que me había mandado Yelena.

DE: MIA🤍

TENGO CASI TODO LISTO, SOLO FALTA TU HERMOSA PRESENCIA🤍

Un nudo se formó en mi estomago mientras que una punzada se clavó en mi pecho, estaba esperándome y le había fallado. Sin pensarlo dos veces marqué su número, sonaba tres veces y luego colgaba, intenté cinco veces más obteniendo el mismo resultado.

-¿Esta todo bien? -. preguntó Kathia al ver mi desespero. 

-No, no lo está -. le fui sincera, no sacaba nada fingir indiferencia delante de ella cuando era obvio que me pasaba algo -Acelera por favor -. le dije y así hizo, aceleró.

-No sabes como me contuve anoche -. confesó Kathia deteniendo el auto frente a Los edificios Belova. Aquello había logrado confundirme más, al parecer ella tenía más clara la película que yo.

-Gracias por traerme -. Le dije sin dejar que se despidiera.

Me bajé de su auto apenas, tambaleándome como idiota dirigiéndome hacia la entrada del edificio, quiero saber que carajos había ocurrido ayer pero por mi propia cuenta. Entré como pude y Ed abrió la puerta, no emitió palabra alguna y solo se dignó a hacer su trabajo, mi misión era ir inmediatamente al apartamento de mi novia, quería verla, olerla, abrazarla y pedirle perdón, esa era mi misión. Como pude, entré al ascensor y presione mil veces el botón del piso correspondiente.

-¡Apura! -. susurré desesperada, las puertas se cerraron lentamente y sentí como subía ¿De verdad tarda tanto? Cuando por fin se abrieron las puertas, caminé decidida al 269.

Golpeé fuertemente la puerta del apartamento de Yelena gritando su nombre por varios minutos cuando la puerta abriéndose interrumpió mis actos.

-¿Kate, qué haces aquí? -. habló Nat sin short mientras comía una manzana como si no pasara nada.

La Chica Del 269 |  Katelena Donde viven las historias. Descúbrelo ahora