¿Tú me amas?

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Venti agarró su celular y llamó a Diluc.

- Oye, Diluc, ¡Feliz navidad! Te lo digo ahora porque no nos veremos en las fiestas.

- Gracias, feliz navidad para ti igualmente, oye... Ando un poco ocupado con Klee, ¿Puedes llamarme luego?

- Claro, no tengo problema.

Venti cortó la llamada, Diluc se iba a ir de vacaciones con unos amigos, Venti no iba a ir ya que a Venti le encantan las fiestas navideñas, y claro, ya tenía todo listo desde hace unos días.

Venti se hizo una chocolatada y fue a sentarse para tomarla, decidió ver su chat con Xiao, vio mensajes viejos de cuando eran... Algo. De pronto, recibió un mensaje de su amigo, desde hace unos 2 días que volvieron a hablarse luego de 3 meses...

- Trencitas, ¿Quieres juntarte conmigo en navidad? Van a estar Kaeya, Rosaria, Xinyan, Barbara, Zhongli, Ajax, Lisa, Hu Tao.... Será el 24.

- ¡Claro que quiero! Sería increíble pasar la navidad contigo y con los demás.

Era el 18 de Diciembre, según las cuentas de Venti, Xiao se iba a declarar a Tao mañana. Se puso un poco triste al pensar eso, según Venti el 19 pasan cosas no lindas...Siguió hablando con Xiao sobre el pasado y cosas así, pensó en decirle algo importante, pero supo que no era el mejor momento.

A Xiao y a Venti les dio sueño, se despidieron, y cuando Venti cerró el chat, se puso muy muy muy feliz. Dejó su celular bajo la almohada y fue a dormir. 

Al dia siguiente, Xiao, pensando que por fin podría liberarse de todos los pensamientos y sentimientos raros que él tenía, se preparó, se puso su mejor ropa, llevó cosas para hacer un picnic y llamó a Hu Tao para ir a una plaza.Tao como de costumbre, llegó tarde, pero eso hizo que Xiao tuviera más tiempo para ordenar todo.

Tao se sentó arriba del mantel rojo que tenía dibujos de flores, al lado de Xiao había una canastita con frutas y sanguches de milanesa, Xiao agarró la mano de Hu Tao la cual estaba llena de anillos, se acercó a ella y le dijo;

- La tarde es tan bella como usted, mí princesa, y las flores son tan lindas como tu forma de ser. - Xiao dijo las palabras más bonitas que había pensado, aunque lo haya dicho de una forma con emoción, el no estaba nada emocionado, no sentía ese sentimiento que tanto había deseado, el amor. 

El pasado de Xiao no fue nada fácil, hasta los 5 años tuvo que vivir bajo las garras de un gran monstruo el cual lo dejaba sin libertad, pensando que eso era el amor verdadero siguió los pasos de ese señor el cual era como su "padre". Hasta que finalmente fue adoptado por una persona con un corazón bondadoso, Zhongli, por Zhongli empezó a tratar a las personas con más respeto, menos a los que no se lo merecían. 

Hu Tao al escuchar las palabras de Xiao no pudo evitar poner una cara de pena, Hu Tao no sentía lo mismo que él, era obvio que Xiao se le iba a declarar, pero era igual de obvio que Xiao solo lo hacia para llenar su vacío interior que sentía al no estar con su amado.

- Bella dama, usted me gusta desde hace unos meses, nos conocemos desde hace mucho y solo quería preguntarte si tu sientes lo mismo.

- No... Xiao, no. Sé que tú quieres a Venti, además, no me gustas... 

Xiao no se sintió mal, sintió como si no tuviera que cargar con el peso de otra cosa, se sintió aliviado... Iba a ser triste estar con alguien a quien no amaba solo para poder sentir lo que era amor otra vez, no quería tener que fingir para poner feliz a Hu Tao.

Xiao se paró, agarró la canasta y se fue, era obvio que después de eso iba a ser todo muy incómodo, pero al menos, él no tendría que fingir.

 

ღ Una apuesta del amor ღDonde viven las historias. Descúbrelo ahora