Cap 3

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La primera nieta Madrigal se encontraba adornando algunas casas con sus flores en el pueblo cuando su amigo y compañero le hizo una pregunta, la cual logro ponerla nerviosa

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La primera nieta Madrigal se encontraba adornando algunas casas con sus flores en el pueblo cuando su amigo y compañero le hizo una pregunta, la cual logro ponerla nerviosa.

David: ¿Por qué evitas a tu primo? Antes eran muy unidos y
Mirabel: Cosas de familia David, cosas de familia

El chico pudo notar la enorme tristeza que escondía su amiga, ya que detrás de esa sonrisa perfecta se encontraba una alma atada con cadenas de pies a cabeza. 

David: Está bien, no preguntaré más al respecto, puedes estar tranquila
Mirabel: ¿Sabes con quién me voy a casar?
David: Respecto a eso Mirabel, yo creo que
Mirabel: Sh sh

El chico se cayó inmediatamente, ambos se escondieron tras una de las casas, escuchando la conversación de unas chicas del pueblo.

---: Aún no se qué le ven todos los chicos del pueblo, ni que su don fuera tan especial, solo puede hacer flores
---: Ella es perfecta, ¿Lo recuerdas?
---: Nadie puede ser perfecto, sería sobrenatural
---: Además, ¿Viste su vestido?
---: Y ese peinado tan horrible
---: Pues a mí me gustaron
---: Tu cállate Rosita
Rosita: Pero
----: Silencio Rosita,

La joven se quedó callada casi de inmediato, y siguió a sus amigas hasta que todas se perdieron del punto de vista de Mirabel.

David: Esas zo-
Mirabel: Sh sh sh, no te rebajes a su nivel (Esas malditas zorras, hijas de +&-#;":$+@;";#-_*#@$*#@$@, tranquila Mirabel, tu eres perfecta, recuerda eso) 
David: Ya ya, mejor vamos a tu casa, tu abuela seguro te necesita para adornar 

La chica asintió, así ambos se retiraron a la gran casa Madrigal.
Cuando estaban por entrar, la Madrigal escucho una conversación, sus ojos avellana fueron hasta aquel lugar, logrando visualizar a su hermana menor, la cual parecía incomoda.

Osvaldo: Oh, y suerte para Antonio, la última ceremonia del don

Mirabel no deseaba escuchar más, así que simplemente ingreso en casita, ignorando por completo el echo de que su hermana debía sentirse sumamente incómoda con esa conversación.

Mirabel: (Todo bien, todo está bien)

Mirabel envidiaba el echo de que su hermana tenía menos presión que el resto de la familia, muchas veces deseaba ser como ella, tomar su lugar.

David: Ey chica, todo está bien, tranquila
Mirabel: ¿Qué deberes siguen?
David: Ten

El muchacho le pasó la lista a su amiga, ella solo la reviso y comenzó a caminar hasta el lugar dónde debía ir, siendo seguida por su fiel amigo.

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La hermana perfectaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora