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POV. Jimin

De camino a casa no pude dejar de pensar en todo lo que había sucedido hace apenas minutos atrás, "Todavía no lo puedo creer, Jungkook resultó ser aquel niño que ayudé... Es cierto que ha cambiado bastante, antes era demasiado delgado, débil, fácil de manipular y ahora es todo lo contrario, pero, aún así, siento que pude haberlo reconocido. Sí Jungkook me hubiera dicho quién era desde un inicio, ¿Qué tan diferente sería nuestra relación...? Como sea, ya es muy tarde para eso, ahora solo queda tratar de recuperar todo este tiempo perdido, saber más de él, escucharlo, comprenderlo, ayudarlo..." Pensé creyendo que eso era lo correcto.

También, mis pensamientos se basaban en el beso que le había dado a Jungkook, pues, por más que trato de encontrar una respuesta válida sobre el porque hice eso me doy cuenta que no hay tal respuesta, "tal vez solo me deje llevar, tal vez me afecto ver en ese estado a Jungkook, verlo abrirse de esa manera tan sincera conmigo, escucharlo, sentirlo tan cerca... Eso hizó que me perdiera y por unos segundos pudiera ver al Jungkook de hace 10 años ocasionando en mí demasiadas emociones en ese momento... Bueno, al menos esa es la explicación que yo tengo", pensé tratando de convencerme a mí mismo.

Después de casí una hora, por fin había llegado a mi casa, abrí la puerta con mucho cuidado temiendo a que Tae se encontrara dentro, pues, todavía no sé si sea capaz de mirarlo a los ojos después de lo que hice...

-Aaah- suspire de alivio al ver que Tae todavía no sé encontraba en la casa- Bien, debo de pensar que decir cuando llegue- dije comenzado a imaginarme un sin fin de escenarios, donde, la gran mayoría, las cosas terminaban muy mal entre nosotros, "¿Debería de contarle sobre Jungkook?, Sí, eso sería lo correcto, ¿No?, Pero... No, definitivamente no puedo decirle, ya que solo basta con que diga su nombre para que Tae explote", pensé recordando todas las veces que hemos terminado mal solo por mencionar el nombre de Jungkook.

"Ya han pasado más de tres horas desde que llegué a la casa y Tae todavía no viene... Estoy comenzando a preocuparme y todo empeora cada vez más con el paso del tiempo. Bien, esperaré una hora como máximo para que llegue, si no llega entre esa hora empezaré a buscarlo", pensé seguro de mí mismo.

-Ya pasan de las 10 P. M. y Tae todavía no llega, ¿Debería de llamar a su celular...?- dije mirando atentamente el reloj de la pared y, como si lo hubiera invocado, escuché como abrían la puerta principal dejandome ver a Tae, nuestras miradas conectaron en menos de un segundo, pero ninguno de los dos decía algo...

Tae me miró por un par de segundos con una cara inexpresiva y, seguido de eso, comenzó a caminar hacia las escaleras entrando así, al cuarto de visitas.

"Ni un buenas noches...", pensé bajando la mirada y sintiendo una tristeza profunda dentro de mí, pues, es doloroso saber que mi brillante y ahora tonta idea de dar el siguiente paso, es decir, convertirnos en novios íba a hacernos más unidos, inseparables, más comprensibles el uno con el otro... Pero ahora me doy cuenta que esta pasando todo lo contrario, "siento que con el paso de los días nos perdemos cada vez más, las peleas se han hecho constantes, las formas de pensar, las formas de actuar, los formas de solucionar, somos tan diferentes en esos aspectos y yo que pensé que éramos almas gemelas, ¿Que nos está pasado...?", pensé sintiendo como una lágrima se resbalaba lentamente por mi mejilla.

AL DÍA SIGUIENTE

-DRING, DRING, DRING- el sonido de la alarma me había despertado por completo, al fijarme en la hora pude ver que eran las 6:15 A. M., con mucha pereza me levante de la cama y fuí directamente hacia la cocina encontrandome con Tae.

-Buenos días...- dije pasando a un lado de él, para así, tomar el cereal.

-Buenos días- dijo Tae después de unos segundos tomandome por sorpresa, ya que, pensé que no iba a recibir respuesta de su parte.

No me cansaré-[Kookmin].Donde viven las historias. Descúbrelo ahora