34

948 121 26
                                    

POV. Jimin

De camino a casa no me pude contener más y, en medio de la parada de autobuses me eché a llorar en silencio, podía sentir las miradas de todas las personas que se encontraban a mi alrededor, yo solo me límite a bajar la cabeza mientras que las lágrimas no paraban de salir, pues, por más que intentara dejar de llorar me era imposible en aquel momento.

Mi corazón dolía como nunca y la sensación de haber perdido a alguién importante se hacía cada vez más presente, "Supongo que aquí termina todo...", pensé sin saber a que me refería con exactitud.

A pesar de que ya habían pasado varios minutos y, que ahora me encontraba en el autobús, las lágrimas en ningún momento dejaban de caer, "A este paso Tae se dará cuenta de que estuve llorando y me preguntará el por qué...", pensé tratando de tranquilizarme, pero mis intentos eran en vano, pues, por más que quisiera dejar de llorar mi cuerpo se negaba a obedecerme.

De repente, sentí como alguién tocaba de mi hombro izquierdo tratando claramente de llamar mi atención. Al girar un poco mi cabeza pude ver a un chico mirándome con cierta preocupación en su rostro.

-Amigo, ¿Te encuentras bien?- preguntó aquel chico de cabello negro.

-Sí, estoy bien, es solo que...- hice una pausa pensando que decir, pues, no puedo decirle a un completo extraño por lo que estoy pasando- Hoy no es mi día, eso es todo- terminé por decir, volviendo mi mirada hacia el piso, "Probablemente me veo demasiado patético ahora", pensé sintiéndome peor.

-No te preocupes, estoy seguro de que todo mejorará- comenzó a decir aquel chico acariciando mi cabeza sin pena alguna, tomandome por sorpresa su atrevimiento- Siempre hay días buenos, días regulares, días malos y días muy, muy malos, es normal, no te desanimes, quiero decir, esta bien llorar de vez en cuando pero también debes salir adelante, arreglar las cosas, solucionar tus problemas, ser sincero con las personas que son importantes en tu vida, siempre hay una luz al final del túnel, incluso si no la ves ahora- dijo sonando totalmente seguro de lo que decía, "Ser sincero con las personas que son importantes para mí... Supongo que debería de empezar por eso", pensé comenzando a sentirme un poco mejor por aquellas palabras de aliento.

-Disculpa, ¿Nos conocemos?- pregunté con obvia curiosidad, pues, éste chico parece saber por todo lo que estoy pasando.

-¿Conocernos? No, no lo creo, al menos para mí esta es la primera vez que te veo- dijo el chico encogiendose de hombros.

-Entonces, ¿Por qué me dices todo eso? Pareciera como si supieras perfectamente por lo que estoy pasando- dije aún sin poder creer que esta es nuestra primera vez hablando.

-No lo sé, es solo que... Parecías estar tan triste y hundido en tus problemas que no pude ignorarlo- dijo desviando por unos instantes su mirada para luego regresarla y mirarme directamente a los ojos- Yo también he pasado por momentos difíciles y cuando necesité a alguién que me dijera que todo estaría bien, que no me preocupara demasiado, que las cosas se solucionarían tarde o temprano... Necesitaba a alguién que estuviera a mi lado, pero, por más que buscara desesperadamente a esa persona, con el paso del tiempo me di cuenta que no tenía a nadie...- dijo haciendo una pequeña pausa para tomar aire y así poder tranquilizarse- Es por eso que me animé a hablarte, ¿Te estoy incómodando? Si es así en verdad lo siento, no fue mí- lo interrumpí.

-No, nada de eso, de hecho, siento que me ayudaste bastante- dije regalándole una pequeña pero sincera sonrisa- Gracias, en verdad necesitaba a alguién como tú en estos momentos- terminé por decir siendo totalmente sincero con mis palabras.

No me cansaré-[Kookmin].Donde viven las historias. Descúbrelo ahora