La chica que duerme al lado

Capítulo 3

Callie:

Después de haber llegado a mi universidad correspondiente fui directo recepción a recojer una de las copias del cuarto, pues el viaje había sido agotador y me apetecía una ducha.

Terminé de hacer todo en el baño de la habitación y salí de éste, allí me encontré con una chica castaña de ojos negros muy linda, Kay, mi nueva compañera, estuvimos hablando un rato hasta que ella se quedó profundamente dormida.

Prrrr....prrrrr....

Mi cell estaba sonando, vi el nombre de Muriel en la pantalla y decidí cogerlo, era mi mejor amiga aunque a veces se ponía algo pesada respecto a mi sexualidad, sí, soy lesbiana y me celaba en exceso, a veces hasta me cabreaba.

- hola wapura- contesté en susurros

- hola tarada- escucho risas de su parte- porque susurras- cuestiona y me la imagino frunciendo el ceño

- porque mi compañera de cuarto se quedó dormida y no quiero despertarla- volteo a verla y una sonrisa tonta se forma en mi rostro- damos una vuelta

- para eso te estaba llamando- siento ruidos desde el otro lado de la línea, seguro había cerrado la puerta- nos vemos en la cafetería- y cuelga

Busco mi sabana de muñequitos y me tomo el atrevimiento de tapar a Kay por si le daba  frío, agarré las llaves y salí  con sutileza de allí.

Llegué a la cafetería y divisé a Muriel sentada en una de las bancas, me acerqué por su espalda y la asusté

- bu- reí a carcajadas al ver su reacción

- idiota casi me da un infarto- se llevó una mano a su pecho fingiendo dolor

- ven aquí querida- la envolví en un abrazo- te extrañe tanto

- y yo a tí esposa mía- ahora era ella la que reía, ya empezó con su bonchecito- y dime- hace un ademán con la mano- como es tu nueva compañera

- es alta, ojinegra, castaña, muy bonita, es de Russia y tiene obsesión por la literatura- le conté lo q sabía hasta ahora sobre Kay y ya empezaba a hacer sus bromitas pesadas

- te gusta la chica nueva- daba pequeños saltitos como si fuera una niña pequeña

- que no, es muy bonita pero apenas la conozco- volteaba los ojos ante sus comentarios

- te gusta la chica nueva- volvía a repetir mi mejor amiga con tono infantil

- ya basta- empeze a cabrearme, adoraba a Muriel pero me sacaba de mis cabales demasiado rápido- mira es aquella chica que está fumando en el barandal- la señale a lo lejos- acerquemonos

- ok vamos- empezamos a caminar en dirección de Kay

Llegamos.....

- que tal la siesta pequeña dormilona- dije tocándole el hombro para que se percatara de nuestra presencia, dedicándole una sonrisa

- de maravilla- me devuelve la sonrisa- por cierto, la sábana de  muñequitos es tuya- pregunta  entrecerrando los ojos con gracia

- sí, es mía, te la dejé por si te daba algo de frío- le sonreí  mientras sacaba un cigarro del bolsillo- por cierto ella es Muriel- señalé a mi amiga

- Hola, mucho gusto- respondió la nombrada dándole una de sus sonrisas fingidas

- hola, yo soy Kay- trataba de mostrarse sincera aunque se había incomodado un poco por los rastros de hipocresía de Muriel

- bueno chica lista cuidado con Callie, ella es mi novia ok- dijo de repente la idiota de mi amiga poniéndose a la defensiva

- Muriel basta ya con eso, tu y yo no somos nada excepto amigas- me había molestado y veía rastros de confusión adueñarse del rostro de la castaña

- porque no hablas Kay- le mira burlona- acaso no sabías que tu compañera es lesbiana

- no, no lo sabía- dió media vuelta y entró a la habitación dando un portazo

- arggg te voy a matar idiota- le dije de mala gana a Muriel quien sólo reía

- yo sólo estaba jugando, tal vez si le gustes a ella- se puso sería

- nos vemos luego-

Me dirigí a la habitación, al entrar vi a Kay tendida boca abajo en su cama, me daba algo de pena hablarle pero tenía que hacerlo.

- Kay- susurré sentándome a su lado- eso es mentira- juguetié con los dedos de mis manos

- que es mentira, lo de que es tu novia o lo de que eres lesbiana- soltó en un hilo de voz sin mirarme a la cara

- lo de que es mi novia- hice una pausa- si, soy lesbiana

- está bien- se gira en la cama para quedar de frente a mí- no tengo problemas con eso, pero yo si que soy hetero ok

- ok, yo siempre te voy a respetar, no te preocupes- dicho esto me fui a mi cama y con un sentimiento raro en mi pecho me dormí