1: Me imaginaba tu y yo en París

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DIONNE

Llego al aeropuerto de París tras un par de horas de viaje. Suspiro mientras veo las maletas pasar por la cinta. Cuando veo la mia, una blanca, pequeña y con una enorme pegatina negra de una brújula, me acerco a ella y la cojo.

Salgo de allí lo más rápido posible. Por lo que se, ha venido el primer equipo del Barça y hay muchos aficionados tanto llegando a la ciudad, como otros ciudadanos locales para ver a sus ídolos.

París. La ciudad de la luz y el amor. Lugar donde voy a ver a mi cantante favorito, Shawn Mendes, actuar mañana por la noche.

Intento ir en taxi, pero es imposible debido a toda la gente que hay por los alrededores de la terminal. Decido salir de allí y buscar un autobús cercano que me lleve al centro de la ciudad, donde esta mi hotel.

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Tras un viaje corto en un bus que he logrado encontrar, llego al centro de París, donde espero encontrar mi hotel antes de cenar, ya que entre una cosa y otra son casi las ocho de la tarde, y últimamente me he acostumbrado a cenar temprano.

Mientras camino arrastrando mi maleta por las calles parisinas, veo que la ciudad no ha cambiado mucho desde la última vez que estuve aquí. Que fue hace casi cinco años, cuando vine con mi madre a ver la final de la Champions masculina. En la ciudad sigue habiendo gente rancia y otra más agradable. Tambien estan las tipicas palomas, por lo que supongo que esto por la noche sera invadido por las ratas. Y sobre todo, calles muy concurridas. Sobre todo por aficionados del Barcelona y de otro equipo que no se cual es, pero supongo que será el rival. Aunque por los colores supongo que sera el City.

Al llegar al hotel me sorprendo. Es mucho mejor de lo que me esperaba.

-Bonjour - digo al recepcionista. Veo en su chapa que pone Erik, y hay varias banderas, supongo que será de los idiomas que habla. Al ver el español sonrío -. O bueno, hola.

- Hola - dice, sonriente.

- Tenía una reserva, a nombre de Dionne Hernández.

El moreno teclea en el ordenador tras oir mi nombre. A los pocos segundos asiente.

- Efectivamente, Dionne. Tu habitación es la 614, pero la estan limpiando ahora y no esta disponible.

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Tras hacer todo el checking y demás, Erik me dice que puedo dejar mi maleta ahí y dar una vuelta o lo que sea.

Por lo que, decido ir a dar una vuelta por la ciudad. No haré la típica guia turística, esa ya la hice con mi madre hace años, simplemente daré un paseo por las calles nas perdidas que vea.

NICO

Aterrizamos en el aeropuerto por la mañana. Hemos entrenado en el parque de los principes, estadio donde se jugará el partido, y ahora el bus se dirige hacia el hotel donde nos hospedaremos toda la plantilla, el equipo técnico y los trabajadores asociados al club.

He de admitir que los nervios me carcomen ahora mismo. Es mi primera final, y, para que mentir, estoy acojonado.

- Nico, la 614 - dice Patri, la organizadora del equipo para las habitaciones.

Asiento, cojo mi mochila y voy para allá.

- Estás nervioso? - pregunta Gavi a mi lado, yendo hacia el asecensor.

-Un poco. Saldrá bien.

Me despido de el en cuanto llegamos al pasillo. Busco con la mirada mi habitación mientras avanzo por el pasillo.

614.

Ahí es.

Tomo la targeta que me dieron hace unos minutos y entro. Pero algo se me hace extraño. Hay una maleta, blanca y con una pegatina de una brújula negra enorme en medio.

-Hola? - digo, pero no obtengo respuesta.

- Holaaa. Hello, bonjour - digo, en todos los idiomas que se la palabra hola y esperando una respuesta.

Pero lo que obtengo es una chica, morena casi pelinegra, con un pequeño flequillo, bajita y ojos cafés envuelta en una toalla.

-Pero que...- digo, pero al darme cuenta de la situación me tapo los ojos con las manos -. Perdón debo haberme equivocado. Esta es la 614?

-Si - murmura ella, extrañada e algo incómoda-. Mi habitación.

-No puede ser.

-Perdona pero,si no te importa, voy desnuda y eres un desconocido, podrías no se, girarte mientras me cambio?

- Oh si claro perdona.

Me giro y ella se cambia.

-Tienen que haberte dado mal la habitación.

-Te la habrán dado mal a ti- espeto.

-A que hora has llegado? - pregunta, algo seca.

-Hace media hora - respondo, con el mismo tono.

-Pues es problema tuyo. Llevo toda la mañana aquí. Apañatelas tu porque no es mi problema.

Tras unos minutos de discusión con la chica pelinegra, me decanto por bajar a recepción. Y ella accede a acompañarme.

DIONNE

- No hay más habitaciones en todo el hotel, si no les importa, tendrán que compartir cuarto.

Ambos miramos mal a la recepcionista.

-Pero no hay nada de nada? - pregunto, incredula.

-Al ser el partido y otros eventos tenemos todo el hotel lleno. Lo siento señorita - dice la mujer de acento francés.

-Que ha dicho? - pregunta el moreno, el cual no sabe inglés y no ha entendido la conversación.

-No hay absolutamente nada más en el hotel. Debemos compartirla.

-Bueno, las camas son separadas.

- La cama es matrimonial - digo, y su cara cambia al instante -. No te conozco de nada - digo, incrédula.

- Ya habrá tiempo para eso.

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Bueno bueno supongo que sorpresa porque esto iba a salir un poco más tarde... pero como ya lo tenia hecho, os dejo aqui el primer capitulo de una de mis historias favoritas. Espero que os guste tanto como a mi 💕

HABITACION 614 | Nico GonzálezDonde viven las historias. Descúbrelo ahora