Después de aquella lucha entre el héroe profesional Saitama y la entidad conocida como DIOS, nuestro calvo favorito fue atacado en una última acción de su oponente y mandándolo a un mundo donde reina la armonía y la amistad.
Saitama caminaba por las calles del tranquilo Ponyville en busca de algo entretenido que hacer, para otros seria un gran día para hacer muchas cosas pero para nuestro héroe solo era un aburrido ida mas. A este punto extrañaba a los Kaijin, por lo menos ellos le daban cierto entretenimiento y tampoco hay que olvidar los duelos que tenia con la enana verde y al castrado ninja.
-¡Que aburrimiento!- se hecho para atrás, tirándose al suelo boca arriba -quien diría que llegaría a extrañar a Fubuki, Sonic y al resto de toca pelotas que conozco- suspiro derrotado, cerro sus ojos y penso en algo que podría hacer
Siguió pensando sin tener muchos resultados. Este mundo era demasiado pacifico para su gusto, tantos años viviendo en un mundo donde salir a comprar tan solo un chicle era una misión suicida, con Kaijines asechando en cada esquina esperando para atacar. Desde amenazas nivel Lobo hasta amenazas de nivel Dragón, su mundo era demasiado caótico y cruel como para que estos caballitos tan amables siquiera duren un día.
Lo cual no es exagerado si hay que tener en cuenta que en su mundo el caos, la muerte y el desparramamiento de sangre son pan de cada día, y tendrías suerte si pasas mas de los 20 años. Aparte los Kaijin no son el único problema sino también los criminales quienes también causan desastres pero a menor escala, aun con un héroe no asegura que saldrás vivo de ahí.
Saitama siguió pensando que podría hacer para quitarse este aburrimiento que le fastidia tanto, el sol estaba en su punto mas alto, la luz claramente le pegaba en la cara pero a el no le importaba mucho. sin embarga esta luz fue tapada por algo, abrió un ojo para ver que era y se trataba de Pinkie Pie quien estaba encima suyo.
-¡Hola Saitama!-
-Ehh, hola Pinkie ¿Puedes salir de encima mío?- la yegua rosada se aparto de un salto aun teniendo su clásica sonrisa -gracias- sin ningún estorbo se levanto del piso y se limpio un poco su ropa -¿Por que estabas encima mío?-
-es que hoy estaba haciendo un pastel de cumpleaños que pidió una madre para el cumpleaños de su potrillo, y recordé que a mi me gustan mucho las fiestas asi que quise hacer una fiesta para todas mis amigas y eso te incluye a ti y Spike, yo recuerdo los gustos de cada poni en Ponyville pero me encontré con el problema de que no conozco ningún gusto tuyo aparte no se lo que eres con exactitud y eso no era posible, se supone que tengo que hacer felices a los ponis con fiestas y sino se lo que te gusta no sabre que hacer en tu cumpleaños, cumpleaños que tampoco se cuando será, asi que salí en tu búsqueda no sin antes pedirle permiso al señor y la señora Cake quienes me dejaron salir a buscarte, pregunte por cada rincón de Ponyville para encontrarte pero nadie sabia donde estabas por lo que use unos globos para flotar y encontrarte pero tampoco funciono por lo que tuve que recurrir a mi Pinkie sentido para en]
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