‡ .𝑼𝒏 𝒔𝒆𝒏𝒕𝒊𝒎𝒊𝒆𝒏𝒕𝒐 𝒅𝒆𝒔𝒄𝒐𝒏𝒐𝒄𝒊𝒅𝒐, 𝒂𝒕𝒆𝒓𝒓𝒂𝒅𝒐𝒓. ‡

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☘︎ 𝐸𝑙 𝑎𝑔𝑢𝑎 𝑎𝑠𝑖́ 𝑐𝑜𝑚𝑜 𝑙𝑎 𝑣𝑖𝑑𝑎,
𝑓𝑙𝑢𝑦𝑒 𝑖𝑛𝑒𝑟𝑡𝑒 𝑦 𝑠𝑒𝑛𝑐𝑖𝑙𝑙𝑎 ☘︎

☘︎ 𝐸𝑙 𝑎𝑔𝑢𝑎 𝑎𝑠𝑖́ 𝑐𝑜𝑚𝑜 𝑙𝑎 𝑣𝑖𝑑𝑎,𝑓𝑙𝑢𝑦𝑒 𝑖𝑛𝑒𝑟𝑡𝑒 𝑦 𝑠𝑒𝑛𝑐𝑖𝑙𝑙𝑎 ☘︎

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Nunca había imaginado que el cielo y todo cambiaría cuando alguien muriera de nuevo. Un ciclo vital y mortal, morir con un propósito establecido y vivir buscando plenamente ese propósito.

¿Cuál era el mío en la vida?¿Lo encontraría?¿Y después qué?¿Morir? No era un plan tan descabellado, pero tampoco era antojable para mí. Oprimí el mochi un poco entre mis dedos, la masa glutinosa se resistía un poco a mi fuerza, como un campo de fuerza protegiendo algo en su interior.

Cómo un cuerpo a una alma.—¿Qué tanto piensas? No me digas que no tienes ganas de dulces, porque eso sería mentira.-dijo Suguru tomando otro pequeño dulce antes de meterlo completamente en su boca.—Pensaba que debimos comprar más sabores, en Sendai he leído tienen un kikufuku realmente delicioso.-mi amigo sonrió ante mis desvarios.

—Ya ha pasado un mes, se siente extraño no ver correr al profesor Satome de un lado al otro...-murmuré y Suguru solo asintió en respuesta, antes no habríamos extrañado esos detalles, pero más que extrañar dejaban un vacío completamente enfermo, tan silencioso que era repugnante.—Pero ellos ya deben estar superándolo, hoy tal vez sea el día.-dijo Suguru y se giró a verme.

En su semblante había algo extraño, una confianza que no conocía hasta ahora.—¿Por qué me miras así? Sucio.-dijo y solté una carcajada, pensar de más en las actitudes de mi amigo no era mi prioridad. Pero no pude dejar de mirar ese extraño brillo en sus ojos, cómo si fuera feliz de ver algo que yo no.—¡Ah!.-en cuánto vi a Nanami caminar por el césped, también ella apareció en mi campo de visión.

Akira hablaba con Haibara tranquilamente, sus ojos eran estoicos pero algo en mi me indicaba que las cosas efectivamente mejoraban, Haibara aún conservaba un semblante melancólico y sereno, lejos de su cálida sonrisa diaria, pero como Suguru lo dijo, en algún momento volverían a ser los mismos. Hechiceros o simples humanos, todos compartíamos esa clase de vida, dónde los muertos se quedaban muertos y los vivos sobrevivían.—¿No irás a molestarlos cómo es tu costumbre? Nanami tiene la guardia baja.-murmuró el pelinegro y negué, masticando lentamente.

—Yaga viene, no quiero lidiar con sus preguntas...Vayamos a buscar Shoko.-le di un leve codazo y asintió, antes de girar, me detuve abruptamente, una sensación de picor en mi nuca y miré fuera una vez más, ese escarlata opaco me enfocaba fijamente y entonces sonrió levemente.

Akira sonrió de forma fugaz, pero estaba seguro que no era simple coincidencia. Mi estómago se oprimió y pensé en mil cosas, ¿Acaso se habría vuelto loca?¿Estaría enferma?¿Su periodo?.—Satoru, ¿En dónde tienes la cabeza? Ven ya.- fui jalado por Suguru y aún bajo ese efecto de ligera adrenalina me atreví a mirar mi reflejo en el ventanal.

Gods I: Lovers. [GOJO SATORU x OC] .Donde viven las historias. Descúbrelo ahora