Soltaste un pequeño suspiro cuando ya solo faltaban diez minutos para que las luces se volvieran a prender.
Ya habías terminado tu desayuno hace un buen rato así que estabas aburrido, si bien no estabas segura de querer volver a la guardería con niños que no te respetan en lo más mínimo no puedes quedarte afuera.
Miraste de golpe al cristal cuando viste por unos segundos unos ojos rojos. Ladeaste levemente la cabeza ante la vista, no había nada pero juras haber visto unos ojos.
Entre cerraste los ojos como si eso fuera a ayudarte en algo pero no fue así, no viste nada, todo se seguía viendo oscuro.
— tal vez solo fue mi imaginación.
Susurraste para ti misma mientras mirabas el rejol en tu muñeca que acababa de vibrar.
"Las luces se prenderán en cinco minutos, prepárate, tu turno ya va a empezar"
Bueno, tu descanso prácticamente ya me había terminado. Te levantaste de tu silla estirandote y dejaste salir un bostezó, te tapaste la boca mientras caminabas a la puerta, miraste el cristal esperando que se prendiera la luz.
Cuando estás se empezaron a prender abriste la puerta de madera, las luces todavía se prendían del otro lado. Era curioso que se prendieran por sección. Miraste al área de siestas volviendo a ver esos ojos rojos solo unos segundos antes que la luz llegara dejando ver a matt.
Solo has visto a tom por los pósters, fuera de eso realmente no crees conocerlo, el mantenimiento diario solo se le da a matt.
Viste como sacudió sus cascabeles mientras decía algo a los niños que no podías escuchar, después de todo estaba lejos y el estaba en un cuarto.
Cuando ya estuviste lo suficientemente cerca los niños salieron corriendo apenas abrió matt la puerta.
— ¿Que tal tu descanso?
Pregunto matt mientras salía del cuarto, lo miraste unos segundos y luego volviste a mirar a los niños que iban a los juegos del lugar.
— bien, no solía tener descansos tan largos.
— me alegro. Oh, por cierto, ¿Podrías encargarte de los niños que están en los juegos? Algunos niños quieren hacer manualidades, así que iré con ellos.
Asentiste ante la petición, ¿Que podría salir mal si supervisas a niños que no te hacen caso? Muchas cosas pero lo intentarias, aunque hacerlo te causará canas, de todos modos no puedes esperar que matt se encargue de ellos todo el tiempo o la mayor parte como había echo hasta ahora.
— está bien, yo me encargo de ellos.
Este sonrió y emepezo a caminar hacia el cuarto de manualidades, empezaste a caminar a dónde estaban los niños que jugaban en los dos grandes juegos que había a mitad de la sala.
Realmente no esperabas que matt, bueno los animatronicos se vean tan...humanos, si bien habías escuchado que la tecnología era de la mejor, no a este punto, se veia demasiado humano, si no te dijieran que es un animatronico antes de verlo, probablemente no te enterarias. No has visto a los de la banda pero seguro se ven igual o más humanos.
Aparte de eso hablar con matt no se siente como si estuviera programado, lo que dice y su voz suenan demasiado fluidos.
El llanto de una niña hizo que salieras de tus pensamientos, buscaste con la mirada a quien lloraba y cuando viste a una pequeña niña en el piso llorando, caminaste a dónde estaba.
