Pequeño Omega - ZeeNunew

Epílogo. Familia

En la sala de espera se podía ver al empresario caminar de un lado al otro ansioso por saber algo sobre su omega, quien tenía más de dos horas dentro del quirófano.

-Zee tienes que calmarte.- pidió Max, quien tenía a su omega sentado sobre sus piernas.

-¿Cómo esperas que me calme si ha pasado una eternidad y aún no se de mi omega?.- se quejó el empresario.

-Es normal que se tarden, le están sacando un bebé, no es cosa fácil, alfa tonto.- agregó Nat burlándose del esposo de su mejor amigo.

-Ustedes no son de mucha ayuda a mis nervios.- dijo Pruk rodando los ojos.

-Tu tampoco, estas llenando de feromonas todo el hospital.- se burló Saran.

-No se como a Nunu le gusta tu aroma.- se quejó Natasitt escondiendo su rostro en el cuello de su pareja.

El pálido podría haber hecho una marca en el piso de tanto caminar de un lado al otro. Sus uñas se vieron atacadas por los nervios y comenzó a morderlas demasiado ansioso por saber de su familia.

-¿Familiares de Chawarin?.- preguntó un doctor llamando la atención del alfa que no dejaba de caminar de ida y vuelta.

-Yo soy su alfa.- se apresuró a decir Zee.

-El omega está sano y el cachorro también, en estos momentos lo están limpiando para llevarlo con su padre.- informó el médico.

-¿Puedo pasar a ver a Nunew?.- preguntó el alfa demasiado ansioso por ver a su familia.

-Por supuesto, pero por el momento solo puede pasar usted, sus amigos deberán esperar un poco.- anunció el doctor al ver a la pareja que estaba detrás de Pruk.

-Está bien, ve con Nunu.- dijo Nat palmeando el hombro del alfa.

-Sígame por favor.- el médico comenzó a caminar con el empresario detrás de él. -Pronto traerán a su cachorro.- dijo abriéndole la puerta a la habitación que resguardaba a Chawarin.

-Mi pequeño omega.- murmuró Zee viendo a su amado recostado en la camilla. Lucía cansado, adormilado, pero también tenía una ligera sonrisa en sus labios.

-Alfa.- susurró Nunew volteando a ver a su pareja.

-¿Cómo te sientes, cariño?.- preguntó acercándose al menor, tomando su mano para darle un amoroso beso en el dorso de esta.

-Adormilado.- respondió el chico. -¿El cachorro está bien?.- cuestionó, pues como no tenía mucho de haber despertado de la anestesia, nadie le había dicho nada al respecto.

-El doctor dice que está sano y que pronto lo traerán para que podamos verlo.- explicó Pruk.

Justo en ese momento la puerta se abrió, dejando ver a una enfermera que empujaba una especie de carrito donde estaba una cuna pequeña con un bebé que estaba llorando.

-Señor Pruk, este es su cachorro.- dijo la mujer tomando con cuidado al bebé para dárselo al hombre mayor.

Con cuidado Zee tomó al pequeño ser y las lágrimas no tardaron en acumularse en sus ojos. El bebé dejó de llorar cuando su padre le tomó su pequeña manita.

-Hola, mi pequeño cachorro.- saludó el empresario a su hijo. -Soy papá, pequeño.-

-Alfa.- lo llamó Chawarin ansioso por ver también a su hijo.

-Lo siento, me emocione.- se disculpó el mayor y con cuidado le entregó el bebé a su pareja.

-Nuestro cachorro.- murmuró Nunew con lágrimas en sus ojos. - Eres tan hermoso.-