Capítulo 15

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—Papá, ¿Yo puedo ver a mamá?— cuando estás palabras salieron de Naruko, Sasuke se tenso, al Uchiha le sentaba mal que Naruko viera a su madre, paso una mano por el cabello intentando mantener la calma.

Los ojos azules le miraron expectantes y el no se pudo negar —De acuerdo, ya sabes las reglas— advirtió y en el cruce se separaron

Naruko quería saber cosas que su padre no le contaría y para eso necesitaba a Ino, aún a pesar de sus desplantes y agresiones, Naruko soñaba con ser amada por la Yamanaka.

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—Papá, yo...

—Sasaki— Naruto tragó saliva, no pudo decir más que abrazar a su hija, la joven sollozo.

—Quiero irme a casa— lloriqueo en el pecho de su padre.

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Sasuke soltó un suspiro antes de entrar a casa unas horas después, el lugar estaba en silencio.

Después de unos momentos escuchó risas, despacio se hacerca para seguir el sonido de las voces.

En la cocina los ve Sasaki, sentada en un banquillo recargada en la barra desayunadora, Naruto le da la espalda mientras cocina, y todo parece un sueño.

Si Ino no hubiera hecho lo que hizo, esto podría ser su vida, unos ojos azules le miran  y en su espalda una voz ~Es que no me quieres papá~  siente el nudo en la garganta porque ahí hay alguien que le necesita.

Las risas lo devuelven al lugar y ve la escena completa, es su casa, es Naruto y Sasaki pero no están solos, el pelirrojo se burla de Naruto por su nula capacidad en la cocina, mientras la otra persona lo está guiando.

Suelta un suspiro, ha perdido mucho, pero tiene a Naruko con el, el sonido que hace al soltar el aire alerta a Sasaki quien se tensa.

—¿Estas bien? — pregunta Kurama deteniendo las risas, Naruto voltea a ver a su hija la cual vuelve a estar abatida, y sus ojos miran detrás de ella.

La cuchara cae de su mano —Sasuke — sale de sus labios el nombre los negros ojos le miran, y el ambiente se vuelve incómodo

Las manos se secan en el delantal —Tome prestada tu cocina — se disculpa comenzando a balbucear sin sentido otro tipo de palabras pareciendo tierno a los ojos de Sasuke

Kurama toma su mano apretándola ligeramente, los ojos azules se desvían de  Sasuke para centrarse en el zorro, le sonríe regresando el apretón

Los ojos del zorro miran a Sasuke deleitándose ante su enojo, los puños apretados ante la escena que no puede reclamar.

Sasaki toma fuerzas de la escena frente a el, se pone de pie, antes de encarar al Uchiha.

—Sr Uchiha — llama colocando una distancia que sorprende a todos, pero que le duele a Sasuke quien mira a su hija, frunciendo el ceño para mirar a Naruto

—Si— dijo al volver su vista a su hija, quien lo miraba con seriedad

—Quiero que otra persona me enseñe a manejar el sharingan— soltó mirando a su padre para ver si lo había pronunciado bien, Naruto asíntio y Sasaki miro determinada a Sasuke

Sasuke miro enojado a Naruto pero contesto con tranquilidad a Sasaki —Lo mejor es que te enseñe a manejarlo yo.

S

asaki mordió su labio, agachando la mirada —Quiero a alguien más.

Sasuke bufo molesto —Naruto— llamo con fuerza, el zorro y Minato se pusieron a la defensiva, pero Naruto los detuvo

—Tengo que hablar contigo en privado— exclamó dando la vuelta esperando que lo siguieran

Sasaki tembló pensando que había ocasionado un disgusto en ambos padres, miro temerosa a Naruto, quien le sonrió —Tranquila, solo hablaremos— sonrió, miro a Kurama quien se acercó a la niña para darle tranquilidad, la distrajo con la preparación de los platillos.

—Pondremos la mesa, no tardes—  advirtió Minato

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Naruko llegó a la florería con alegría siendo recibido por la abuela, quien arreglaba las flores.

—Abuela — llamo emocionada de las pocas personas que le querían sus abuelos eran de ellos.

—Naruko, pero que grande estás — hablo la mujer con una sonrisa para rodear el mostrador abrazándola.

—He venido a comer con ustedes — sonrió

La mujer mordió sus labios mirando inconscientemente adentro de la casa, soltó un suspiro, sonriendo de nuevo —Claro que si, are tu comida favorita — dijo

Ambas entraron a la casa, Ino estaba sentada en algún lugar fuera de la vista cuando vio a Naruko.

—La pequeña mierda esta aqui— escupió  las palabras haciendo que la rubia se encogiera

—Ino— reprendió su madre, con una fiera mirada

La Yamanaka sonrió, levantando de dónde estaba, paso a un costado de su hija golpeando su cabeza con la mano —Aparta pequeña mierda — se burló

Naruko agachó la mirada mordiendo sus labios, las lágrimas salieron de sus ojos, las cuales rápidamente seco.

—Veo que estás bien, madre— tartamudeo Naruko sin mirarla

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Sasuke espero hasta que Naruto entrara, para encararlo —¡Porque le pediste que lo hiciera!, Naruto soy conciente del problema que tenemos, pero no puedes hacer esto, es mi hija — grito furioso

Naruto se sintió ofendido, no solamente había sido recriminado por Sasuke, también Sasaki le recriminó lo mismo.

—Yo no tengo nada que ver en sus decisiones — respondió enojado

—Llegaste y cambio de parecer — hablo Sasuke mirando al rubio con molestia con tristeza con anhelo

—Deberás ver cómo la tratas, para que sienta que otro debe enseñarle — recriminó Naruto

Sasuke se molestó —Si hubiera sabido de su existencia, si hubiera estado a su lado, sería más fácil — se quejo — Tu me la arrebataste, me quitaste a mi hija.

Naruto lo miro con tristeza, con dolor y enojo —¿Y que esperabas que hiciera?— se quejo en un sollozo —¿Cómo podría decirte?, Recuerdas como te encontré — pregunto alzando la cabeza mirando los ojos negros

—Naruto...— llamo con tristeza

—No, Sasuke no, deberías saber que Sasaki es tu hija también y las diferencias que haces con ella— dió dos pasos acercándose a la puerta miro a Sasuke y volvió a salir.

Hola ¡Soy tu hija!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora