James Buchanan Barnes estaba completamente harto de su idiota, imprudente, irresponsable y ridículo esposo.
"¡Steven Grant Rogers!", habló por el comunicador en el momento en que Steve estuvo fuera de la ahora arruinada base de Hydra. "¿Estás intentando que te maten?."
"Oh, esto debería ser bueno", respondió Wilson con una sonrisa.
Los cinco, Barnes, Rogers, Wilson, Barton y Romanoff, habían estado haciendo todo lo posible para eliminar tantas bases de Hydra como fuera posible después de la revelación de S.H.I.E.L.D./HYDRA hace casi un año y medio. La IA de Stark había identificado una base a unas pocas horas de distancia en Pensilvania, por lo que se habían preparado para reducir el lugar a escombros lo mejor que pudieron.
Steve, desafortunadamente, había adquirido el mal hábito de casi hacerse explotar, y esta base no había sido diferente. Bucky había estado de servicio como francotirador con Clint mientras Steve, Sam y Natasha derribaban la base desde el interior, y había observado con mudo horror cómo Steve apenas despejaba la base con segundos de sobra antes de que todo estallara en una enorme explosión.
Iba a hablar seriamente con Natasha y Sam sobre sus habilidades para vigilar la espalda de Steve. Steve podría haber sido la mejor mente táctica de su generación, pero siempre iba a ser ese pequeño hombre de Brooklyn demasiado tonto para no huir de una pelea. Las peleas acababan de convertirse en organizaciones nazis no tan secretas y sus bases fácilmente inflamables.
"Vamos, Buck", dijo Steve, casi sin aliento después de su casi accidente con la muerte. Bucky ni siquiera sabía cómo el comunicador del idiota estaba todavía en línea, pero supuso que Stark era lo suficientemente bueno en su trabajo. "¡Ni siquiera estuve tan cerca de la explosión!."
"Diez dólares a que no hablan hasta que lleguemos a casa", ofreció Barton con una risita. Bucky se giró para mirarlo de manera fulminante, pero Barton se rió de nuevo antes de comenzar a guardar su arco.
"Quince a que se besan incluso antes de que nos subamos al jet", respondió Natasha.
Bucky hizo todo lo posible por ignorar resueltamente los comienzos del grupo habitual de apuestas. A sus estúpidos amigos les encantaba apostar sobre lo que él y Steve harían cada vez que Bucky perdiera la paciencia, y solo lo toleraba porque eran sus amigos, por más molestos que fueran.
"Ambos están en lo cierto", coincidió Wilson. Bucky fulminó con la mirada al cielo mientras Wilson daba una vuelta final alrededor del perímetro para comprobar si no había rezagados. "Barnes, puedo sentir que me miras con furia desde aquí."
"Bueno." Bucky guardó su rifle de francotirador rápidamente para tener ambas manos libres cuando Steve se acercara lo suficiente. "Espero que ambos lo estén."
No fue nada para Bucky saltar del árbol en el que había estado subido durante casi una hora. Aterrizó en silencio justo cuando Natasha pasaba junto a él con una sonrisa en su camino al quinjet. "vy dvoye ocharovatel'ny (ustedes dos son adorables)."
"Ocharovatel'ny tol'ko dlya lyudey, kotoryye ne pytayutsya vzorvat' sebya (adorable es solo para las personas que no intentan hacerse explotar)", respondió Bucky, igualando su uso del ruso sin pestañear.
"Oye, pensé que habíamos dicho que no hablemos mierda en ruso", se quejó Wilson. Bucky escuchó una ráfaga de viento cuando Wilson comenzó su descenso hacia el quinjet. "Todos ustedes saben que quiero que me incluyan, si, eso es lo que estamos haciendo."
"Lástima que me gusta excluirte", dijo Bucky inexpresivamente.
"Esa no es forma de hablar con tu mejor amigo, Barnes."
"¿Quién dijo algo sobre que éramos amigos en primer lugar, Wilson?."
"Pensé que el puesto estaba abierto después de las últimas travesuras de Steve."
"¡Oye!", Steve protestó. Bucky tuvo que reprimir una sonrisa ante el tono de indignación en la voz de su esposo, todavía estaba enojado con él. "Ese puesto no está disponible, Sam."
"Lo que tú digas, Rogers", bromeó Wilson antes de ponerse serio. "Natasha, estaré en el quinjet en treinta segundos."
"Recibido, Sam", respondió Natasha. El sonido de la maquinaria de fondo sugería que el quinjet estaría operativo dentro de un minuto más o menos. "Clint, quédate donde estás para que podamos tener una idea de quién está ganando nuestra apuesta."
"Lo haré", estuvo de acuerdo Barton con demasiado entusiasmo. Bucky consideró seriamente derribar el árbol en el que Barton todavía estaba posado, pero finalmente decidió no hacerlo a favor de proteger la naturaleza.
"Ustedes son unos idiotas", dijo Bucky en su lugar.
"Somos tus idiotas", respondió Barton, y luego emitió un chasquido de desagrado con su boca. "Oh, no quise decirlo así como suena..."
Bucky se salvó de tener que escuchar más por la repentina aparición de un tal Steven Grant Rogers, quien al menos tuvo la decencia de parecer un poco avergonzado cuando se acercó a Bucky. Todavía tenía el escudo en las manos, pero se lo colocó en la espalda con un movimiento fluido, y Bucky ignoró con determinación cuán deliciosamente se movían los músculos de Steve con la acción.
"¿Tienes un maldito deseo de muerte, Rogers?", espetó Bucky, las placas en su brazo retumbaron mientras cruzaba los brazos sobre su pecho.
"Te prometo que no, Buck", respondió Steve con una sonrisa. Bucky obstinadamente dejó de lado lo adorable que se veía Steve con su cabello dorado saliendo en todas direcciones para enfocarse en las diversas marcas de quemaduras en el uniforme de Steve.
"¡No cerca de la explosión mi trasero, Steven!", Bucky comenzó a hurgar en todas las quemaduras en ese uniforme estrellado con el ceño fruncido. "¿Qué demonios es esto?."
"No es tan malo como parece", respondió Steve. "¡Mis oídos ya casi no zumban!."
Bucky fulminó con la mirada a Steve. "¿Así que casi explotas y además jodiste tu audición?."
"Sabes que el suero se encarga de todo. Mi audición estará bien incluso antes de que despeguemos."
"No me importa de lo que se encargue el suero. ¡Tienes una grave falta de autoconservación, y no soy el malo por señalarlo!."
"Nadie dijo que tú eras el malo, amigo", respondió Steve, todavía sonriendo mientras deslizaba un brazo alrededor de la cintura de Bucky y los acercaba.
"Tienes que dejar de ser un jodido idiota...", Bucky fue rápidamente interrumpido por Steve, hundiendo su otra mano en el cabello de Bucky y juntando sus labios. Bucky no pudo evitar derretirse contra esas manos fuertes sobre él y le devolvió el beso, casi suspirando de alivio ante el recordatorio físico de que Steve estaba todavía aquí con él.
"No puedes dejarme, Steve", murmuró Bucky contra los suaves labios de su esposo, sus dedos aferrándose desesperadamente alrededor de los anchos hombros de Steve. "Odio verte hacer cosas estúpidas como esas cuando no estoy a tu lado cuidándote la espalda."
"Lo siento. Sabes que nunca iré a un lugar al que no puedas seguirme, Buck". Steve se apartó lo suficiente para que Bucky pudiera ver la sinceridad en esos ojos azules que tanto amaba. "Todavía no es el final de la línea, ¿de acuerdo?. Lo prometo."
"Tonto", se quejó Bucky.
Steve solo sonrió y dijo: "Tú me hiciste así."
"Como sea. Solo deja de intentar que te exploten, pequeño punk."
"Lo intentaré, jerk. ¿Puedo besarte de nuevo ahora?."
Bucky ignoró firmemente los sonidos del dinero intercambiando manos mientras besaba a su esposo con cariño y entusiasmo.
★ F I N ★
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Kiss Me Once, Then Kiss Me Twice - [stucky]
Fiksi Penggemar[traducción] James Buchanan Barnes estaba completamente harto de su idiota, imprudente, irresponsable y ridículo esposo. (O, la vez que Bucky le grita a Steve después de una misión y Steve lo hace callar con un beso.) ° • ⁀➷ ° • ⁀➷ ° • ⁀➷ ° • ⁀➷ ° •...