continuación de LA HERMANA DE CHECO
para ponernos en contexto antes de LAS CHICAS DEL PADDOCK sobre nuestra pareja favorita Carlethia 🔥❤️
Narrado por Alethia Pérez
Pase unos días lejos de Carlos, visite a una amiga, a mi madre y viaje al GP de Mexico dispuesta a sonreír y apoya a mi hermano y esposo, pero ese fin de semana no fue para nada lo que yo imaginaba.
Checo me había llamado según él para entregarme algo así que lo vi en el estacionamiento del hotel.
Alethia- ¿que es esto? - dije recibiendo un sobre
Checo- tú contrato - abrí los ojos de la impresión y lo abrí - quieren que lo revises y así tener tiempo de negociar cualquier punto
Alethia- aun no sé si
Checo- no puedo decirte que hacer hermana, pero el que sea tu esposo no le da derecho sobre tus elecciones
Alethia- lose, te quiero - le di un abrazo
Checo- te quiero monstruo
Me quede mirando el sobre con el logotipo de RedBull con una sonrisa en mi rostro ¿esto era real? Se sentía como un sueño.
- ¿estás mirando porno? - era la voz de un inglés muy conocido
Alethia- George Russell Justo al inglés que buscaba
Russell- ¿ a mi ?
Alethia- a ti, que pensaste de lo que te dije ¿irás?
Russell- era ella cierto - sonrío de oreja a oreja - yo sabía que era ella, no podría olvidar esos ojos ni en mil vidas
Alethia- entonces debes estar ahí
Russell- pero y ¿qué tal si ella no me quiere ahí?
Alethia- tenerte ahí cuando sea campeona de Nascar es lo que ella más quiere créeme
Russell- entonces ahí estaré - sonrío
Alethia- me da gusto y necesito detalles de todo
Russell- cuenta con ello - dijo dándome un abrazo - te veo pronto
Subí a mi habitación aún con esa sonrisa por mi futuro trabajo y claro por haber ayudado a Russell a reencontrarse con su chica. Pero mi sonrisa se borró radicalmente en un solo minuto, estaba llegando a la puerta de mi habitación cuando mi celular se volvió loco, un sin fin de notificaciónes llegaba a mi por segundo, solo fue necesario abrir una de ellas para entender lo que pasaba
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Un golpe fuerte tocó mi corazón y un dolor inmenso en la boca del estómago, no podía creer lo que miraba. Quería ser madura, quería entrar a la habitación y hablar de una manera serena con Carlos, quizá todo era un malentendido y él y él no me había fallado.
Respire hondo, aguante las lágrimas y abrí la puerta
- ¿que mierda hacías abrazando a Russell? - fueron sus palabras
Alethia- ¿que?
Carlos- ya me oíste ¿por que estabas con el? - rei sarcástica al verlo hacerme esta escena después de lo que yo había mirado hace un segundo - ¿que es tan divertido?
