Para Na Jaemin que estudiaba en la facultad de Ciencias de la física, él aseguraba que todo tenía una teoría, y cuando su amigo Lee Jeno le pide ayuda con una chica, se pone una meta de que él sería el primero en descubrir aquella teoría, ¿Y qué más...
Haruto estaba sentado a mi lado, ayudándome a inflar ese lindo globo rojo en forma de corazón, mientras yo pensaba una y otra vez en qué debía escribir exactamente en esa nota. ¿Jaemin ten un lindo día? ¿Jaemin me gusta tu cabello, te ves hermoso? Y una idea de pasó por mi mente.
Te daría mi corazón, pero ya te lo robaste.
Sonreí satisfecho con la hermosa letra mía, la nota coincidía con el globo. Miré a Haruto con una sonrisa, éste rodó los ojos al ver lo cliché que estaba siendo. Tomé pega y pegué la nota en el globo. Y a continuación tomé el globo para lanzarlo hacia la mesa de la frente, justo donde Jaemin descansaba, tardó un poco llegar, pero cuando lo hizo, me sentí nervioso de nuevo, tratando de esconderme atrás del cuerpo de Haruto, quién por cierto era más alto que yo.
Miré por encima del hombro de Haruto como Jaemin miraba el globo, tal vez leyendo la nota, pero sin llegar a tocarlo. Mis ojos brillaban, lo sabía.
Teoría tres: ¡Na Jaemin adora los pequeños detalles!
Más no me esperaba que con su lápiz pinchara el globo y éste se explotara. Enterré mis pequeñas uñas en los hombros de Haruto, escuchando un pequeño gemido de dolor del nombrado.
—Sí, me lo robé, y ahora también te lo rompí, suerte con conseguir otro. — Dijo lo suficiente alto para escuchar todo, las personas en la cafetería cuchicheando, yo Fruncí el ceño, Haruto riéndose de mi tercera teoría fallida —
—¡Haruto! — Susurré con molestia, dejando un pequeño golpe en su hombro. ¡Oii, Jaemin estaba siendo muy difícil! No era que se lo pidiera fácil, pero tampoco tan cruel —
Solté un suspiro con cansancio, ¿Teoría cuatro? Sí, tal vez la teoría cuatro no me iba a fallar, tenía esperanzas de hacer cambiar de opinión a Jaemin. Más, ¿Qué iba a hacer? Tenía que pensar algo rápido, las ideas se me agotaban, y sólo llevaba tres días en esto.
Jaemin se levantó de su mesa para luego irse. Salí de mi "escondite" y me senté aún lado de Haruto, dejado caer mi cabeza de manera tosca en la mesa. Haruto mirándome preocupado.
—¿Estás bien?
—No, Haruto.
—De verdad Jaeminie te está ignorando fuerte. Te lo está poniendo difícil, ¡Más no te rindas! Demuestras que no eres tan idiota como pareces. — Intentó animar Haruto. Si es que eso era animar —
—Si es idiota. — Se unió a la conversación Ten, realmente aburrido de los intentos fallidos de su amigo — Míralo nomás, es tan estúpido, que de seguro también se quiere rendir.
No hice ningún movimiento al escuchar aquello. Ten me conocía.
—Pero déjalo que se rinda, que por lo que sé, Jaemin tiene un pretendiente, capaz y se aburrió de Jeno, y ahora le gusta ese guapo chico, porque está más guapo que Jeno. — Ten miró sus uñas inocentemente. Fruncí el ceño, ¿Cómo qué alguien estaba conquistando a mí Jaemin —
Sentía mi sangre calentarse, ¿¡Cómo qué alguien más guapo!? ¿¡Quién mierda estaba conquistando a mí Jaemin!? Me levanté de golpe de la mesa, los dos chicos mirándome atentos, rodé los ojos.
—¡Pues sea quien sea, le mostraré que soy yo quien manda en el corazón de Jaemin! — Y me fui, dejando al parque mirándose entre sí —
—¿Es verdad? — Susurró Haruto, y Ten soltó una risa —
—La mitad si, la mitad no. Si hay un pretendiente, pero Jaemin lo rechazó, tal vez le sigue gustando Jeno, ¿Pero crees que si le digo eso a Jeno se iba a levantar de ahí? Seguiría deprimido, con eso, él no se va a rendir y va a pensar en que otra cosa hacer. — Haruto miró realmente sorprendido a Ten, el chico era un genio, lástima que Jeno no había alcanzado a escuchar aquello
—Eres un genio, Ten. — Alagó —
—¿Verdad que sí? — Alzó sus cejas repetidas veces feliz de ver a su amigo molesto porqué alguien más gustaba de Jaemin —
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Compré muchas bebidas energéticas, de esas que le gustaban mucho a Jaemin. Caminé hacia su cuarto, teniendo esperanzas de que ninguno de los dos que vivían ahí, estuvieran en ese preciso momento.
Saqué la llave de mi bolsillo, sí, tenía todas las copias, así como Jaemin, confiábamos plenamente uno en el otro. Una sonrisa triste apareció en mi rostro.
Teoría cuatro: Na Jaemin gusta mucho de bebidas energéticas, cuando se sentía molesto, tomaba una bebida energética y volvía a su estado normal.
Así que entró con cuidado al cuarto, vigilando que no hubiera nadie, y así era, si él no se equivocaba, Jisung estaba en clases de Gimnasia, y Jaemin seguro andaba por ahí en cualquier parque, me traté de apresurar un poco, no quería que me descubrieran en el acto.
Empecé a sacar las bebidas energéticas para colocarlas esparcidas en su cama, y así fue, coloqué alrededor de quince latas, luego esparcí pétalos de rosas en su cama. Solté un suspiro, yo sólo quería que Jaemin viera que estaba preocupado por él, que supiera que estaba presente, que supiera que era un tonto al no decirle que también me gustaba. Sólo eso quería que notara, que viera que soy un tonto y que tomó muy mal mis decisiones.
Salí de la habitación con el mismo cuidado, pensando en si de verdad Jaemin me iba a perdonar por mis idioteces, mi corazón estrujándose al mirar la alfombra y recordar el lindo día que tuvimos al ir a comprarla. ¿Por qué yo había sido tan tonto? Sabía que no hacía nada arrepintiéndome, pero ¿Y si hubiera seguido las señales de mi corazón? Aseguraba que todo hubiera sido diferente.
Yo sólo quería a Jaemin de vuelta.
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