˖࣪𖥨 𝘬𝘫æ𝘳𝘭𝘪𝘨𝘩𝘦𝘵 ﻬ˚ ͙𓆤

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Después de tantos días en ese lugar el moreno alado solo podía pensar una cosa, belleza, todo era realmente bello desde el verde pasto al estrellado cielo  que resaltaba unas rojizas pupilas con las que quedaba hipnotizado ante aquel ser que deseaba matar

Jamás de imagino así mirando como aquel demonio regaba sus plantas con delicadeza frente a el dejando a su enorme ala arrastre por el suelo cada vez que caminaba, regalarle una sonrisa cada vez que se miraban, ahora mismo se sentía... Como en casa

Pero cada vez que miraba aquella otra ala tan rota y lastimada causaba un dolor extraño en su pecho, pensar que jamás podría volar otra vez era difícil no sabía dónde estaría el sin una de sus alas, estar encadenado al suelo es horrible. El cuervo de acercó a el una vez terminó de regar sentándose a su lado en aquellos escalones de madera de esa cabaña suspirando suave sus miradas chocaron haciéndolos sonreír

–  Entonces.. –. Murmuró primero el cuervo – Puedo asumir que te quedarás aquí, ¿No es así? –. Sonrió suave al decirlo

Fargan alzó los hombros ante una sonrisa – Tampoco puedo volver con las manos vacías, debía matarte demonio del mal –. La última frase fue dicha con humor

Focus rodó los ojos haciendo reír al contrario – Aún así... ¿No extrañas a tu madre?

El búho bufo – Ella será la primera en verme decepcionada, estoy seguro que no siquiera deseara verme

El cuervo miro el suelo con sus rojizos ojos y su rostro avergonzado por lo que trataba de decir – Tu... –. Murmuró despacio, era extraño para el decirlo – ¿Te quedarías aquí?

Los ojos mieles del menor se abrieron con impresión ante la propuesta, era diferente y extraño invitando a la persona que casi termina con su vida a quedarse con el – Si no soy una molestia –. Fargan ponía su palma en su pecho agradeciendo con el gesto – Estaría muy agradecido de ser bienvenido

Una sonrisa blanca y bella se pintaba en los labios del pelinegro asintiendo a su vez, la conversación terminó ahí pero ambos se sentían nerviosos como niños recién enamorados sus mejillas se pintaban de carmín con solo una simple mirada, su cuerpo temblaba por el mínimo roce de sus dedos y las palabras no salían de sus gargantas, un sentimiento nuevo pero uno que no deseaban dejar de sentir

Focus volteo a la montaña donde una luz comenzaba a deslumbrar tras ella, era hora de despedirse por hoy, miro al joven a su lado sintiendo un extraño dolor en su pecho con solo pensarlo, no quería abandonarlo pero no fue necesario de explicar pues los mieles ojos también miraban la montaña

Aquel búho de levanto del viejo tronco dándole la mano a un cuervo – Déjame acompañarte por hoy –. Susurro suave, una pálida mano tomó la morena comenzando a caminar por el lugar

Sentían el césped, las flores rozar con sus prendas tratando de hacer el camino lo más lento posible para ambos distrayendo con cualquier cosa como si fuese lo más importante del mundo... Solo que para ellos si lo era. Sus manos se alejaban cuando por fin llegaron a la vieja cabaña, tan lento que podría matarlos soltaban el uno al otro sintiendo el frío en su palma antes de entrar a la oscuridad del lugar y un búho quedarse el abandonado vacío

Cuando el sol llegó sus ojos pesaban tanto ahora realmente tenía un horario de búho al estar despierto toda la noche y dormir durante el día necesitaba descansar ahora mismo dando una última mirada a la vieja puerta el búho murmuró “buenas noches Focus”

Sus dulces sueños fueron interrumpidos ante una fastidiosa voz quien molestaba una y otra vez al hablar, moviéndolo con fuerza con tal de despertarlo

– ¡Fargan que son las 6 de la tarde! –. Le gritaba un castaño de lentes, Juan había vuelto después de unos días de reunir suministros para ambos, Fargan sabía que todos lo miraban como hombre muerto

– Lo siento –. Murmuró él moreno búho – Necesitaba descansar yo...

– Otra vez te quedaste despertó con Focus –. Interrumpió el de lentes al instante – Ambos parecen unos niños por Dios que ninguno avanza, ¿Sabes cuánto tenemos aquí?

– La verdad que muy poco –. Contesto como si nada aquel moreno – Es imposible enamorarse en solo semanas

– Es que de seguro al cuando trataron de matarse sintieron algo diferente, estoy seguro por qué tampoco hay ninguna razón de que sigas aquí tanto qué tampoco vas al pueblo por suministros –. Hablaba "lógicamente" el cura (en realidad solo es un monaguillo)

– ¡A ti no te importa eso! –. Grito avergonzado antes de soltando un quejido negando – Como sea estoy hambriento, ¿Qué hay para comer?

– Para ti nada por gritarme –. Actuó triste con un horrible puchero antes de alejarse de él con la bolsa en dirección a la cabaña

– ¡Eres un maldito!

El de lentes saco la lengua antes de cerrar con fuerza la puerta de esa cabaña en ruinas, el búho estaba tan cerca de levantarse a mala gana para perseguirlo sin embargo su merienda estaba en el suelo

Rodó los ojos recordando que antes el solía ser así, extrañaba demasiado los viejos tiempos dónde no debía preocuparse por nada y seguía siento un desastre de bromas para todos, recuerda como la gente reía a su alrededor con cada broma piadosa que solía hacer. Nego y una última vez eso ya no era el, abrió su alimento comiendo despacio ante la nostalgia la que comía su corazón

Un joven de lentes salió del lugar con una mueca de tristeza mientras Fargan tenía la boca llena tratando de alejarlo, no quería que su comida tenga peor sabor pero fue tarde aquel cura ya se encontraba sentado a su lado con los ojos aguados

– El te gusta, ¿no? –. Fargan casi escupe su comida cuando lo escucho comenzando a toser con fuerza

– ¡¿Qué mierda Juan?! –. Grito al tener un rostro ardiendo en vergüenza haciendo reír al joven de anteojos

– ¡Mírate pareces un tomate! –. El joven seguía riendo sin embargo pareció recordar algo que paro sus carcajadas _ Tu... ¿Harías cualquier cosa por el? –. Murmuró despacio haciendo que la vergüenza del búho desaparezca

– ¿De qué hablas? –. Dijo extrañado – Supongo que si creo que haría cualquier cosa por el

La mirada pícara del cura volvió, ¡¿Era una trampa?! Se sentía tan avergonzado como el humano se reía de el a carcajadas

– Bueno.. –. Dijo parando sus risas, el cura miraba el suelo con una suave sonrisa – De verdad me alegra escuchar eso

Si a Juan realmente le alegraba escuchar aquello

¿Qué tenía planeado el cuervo?


Actu corta, se vienen el final

𝘙𝘪𝘴𝘦𝘴 𝘵𝘩𝘦 𝙢𝙤𝙤𝙣 [Farcus]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora