〰️CAPITULO 9〰️

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-Creo que voy a...-murmuro Poppy en el mismo instante que su boca se abría y salía un líquido espeso de color verde.

Estaba vomitando. Oh dios mío. Que desagradable, aquello hizo que mi estómago se contragera...no pude soportarlo.

Me aparté de ella quitando mi brazo del suyo, al hacerlo Poppy se tambaleó a punto de caer en picado al suelo, pero
el desconocido con agilidad y velocidad la agarró del hombro para sostenerla.

Tenia muy buenos reflejos, era demasiado ágil, una persona normal no habría podido llegar a tiempo...

Si no la hubiera agarrado el, seguramente ella hubiera caído al suelo sobre su propio vomito y se hubiera hecho daño.

-¿¡Poppy estas bien!? ¡Oh no! ¡Poppy! ¡¿Que te han dado en la bebida esos hombres!? - pregunte alterada y preocupada, con el corazón acelerado.

-No seas dramática- dijo el desconocido con seriedad - Esto es normal en gente que bebe mucho...¿Es que tu no sales nunca de fiesta?

-No me gustan las fiestas. Las odio.

-Ya lo he notado - Hablo con sarcasmo.

Poppy seguía vomitando, el desconocido con una mano la sujetaba, con su otra mano libre agarró el cabello de mi hermana, para evitar que se manchará de vomito.

Pero de alguna forma me sentí mal al ver como el cuidaba a mi hermana mientras yo me quedaba mirando, así que cuando ella terminó de echarlo todo, la aparté del desconocido y la apoyé de nuevo sobre mi hombro.

-Gracias por ayudarla...eh...¿Como te llamas? - mis mejillas se enrojecieron al hacer aquella pregunta. ¿Por que me sentia tan idiota haciendo esa pregunta?

Este lo noto, curvando ligeramente sus labios con una sonrisa siniestra.

-Fredek Fedorov.

-Curioso nombre...y muy extraño apellido, nunca lo había escuchado. ¿No eres de aquí verdad?

-No.

-¿De donde eres?

-De muy lejos.

-¿Pero de donde exactamente?

-Eso no te importa - hablo serio. Como si aquella pregunta le molestará.

-Vale vale, tranquilo señor gruñón...yo soy Alaska Dumont.

De repente se escuchó un quejido de Poppy.
Rápidamente me giré para mirarla.

-¿Poppy esta bien? - pregunte con toda la suavidad que pude.

-Me siento mal...-susurro ella con voz débil.

-Seguramente te han drogado...-dije preocupada.

-No - afirmo el chico a mi lado, bastante convencido-  no ha ingerido ninguna droga.

-¿Que sabrás tu?

-Hazme caso.

-No puedo fiarme conpletamente de ti, eres un desconocido, prefiero llevarla a un hospital y que le hagan una prueba.

-Se reconocer cuando alguien se ha drogado y ella no lo está.

Si el entendía de estas cosas era por que las habia probado...De repente me sentía muy nerviosa por salir de ahí. Queria estar en mi casa lo antes posible.

-Me siento mareada- anuncio Poppy con el rostro muy pálido,sus ojos se le iban cerrando poco a poco.

Tenia que salir de allí de inmediato.

-La salida es esa de ahí- dijo Fredek señalando con la mirada una puerta negra que había a unos cuantos metros de mi.

Agarre con fuerza a mi hermana, arrancandola del desconocido.

AMOR ITALIANO ✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora