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Elijah Mikaelson 1/2

Título:

No almas gemelas

Nota:

AU de almas gemelas

Almas gemelas, la gente se volvía tan insoportable cuándo de ese tema se trababa, todo el mundo ansioso por ver las muñecas de las personas que más les gustaban esperando ver su nombre grabado en ellas, con el color de ropa que usaban hoy.

Así funcionaba, al llegar a la edad que el destino considerará apropiada, los 22 años, en tu muñeca aparece el nombre de la que es tu alma gemela, en el color que más resalté en la ropa que use esa persona cada día.

- ¿No es muy temprano para que estés fuera de la cama? - Alan, mi mejor amigo con derechos sonrió desde su posición en la cama, con su antebrazo izquierdo cubriendo sus ojos, el nombre en su muñeca resaltando de amarillo - No será acaso... ¿Estás emocionada por él? O bueno también puede ser una chica.

- ¿Emocionada? No hay nada en las almas gemelas que me emocioné - Me levanté de donde me encontraba en la orilla de la cama sentada - Después de todo ambos sabemos cómo está resultando eso para tí y Lily.

- Lo nuestro es complicado - Su voz agresiva mientras recogía mi ropa y me dirigía al baño - No lo entenderías, nosotros...

- Vamos amigo, es tu alma gemela, no deberías hacerlo complicado, simplemente debés dejar de apretar su botones y vivir en negación - Me recosté en el marco de la puerta del baño, aferrandome a la sábana que cubría mi desnudez - No hay cambios, ella te ama, así que deberías dejar de traer mi hermoso trasero a tu cama cada vez que te sientes demasiado enamorado de ella.

- Así pues... - Terminé de entrar al baño y cerré la puerta a mi espalda mientras el gritaba - ¡Yo no escuché a tu hermoso trasero quejarse anoche!
Reí, mientras intentaba que eso atrapará las lágrimas en mis ojos, yo era una mierda de persona, no hay otra palabra para describirme.

Dirigí una mirada a mi muñeca, el nombre en color azul rey resaltando como un anuncio de neón en medio de la noche.

- Aún no te conozco y ya te debo tantas disculpas - Deje caer la sábana y me miré en el espejo, concrétame mi muñeca - Lamento tanto tu mala suerte Elijah.

✾✾✾✾✾

Toda la familia Mikaelson miraban impresionados la muñeca del original de traje, un nombre resaltando en ella con un ligero color gris claro.

- Un alma gemela... - Klaus susurro, sus ojos entrecerrados, llenos de desconfianza - Hace siglos que ninguno de nosotros tenía un nombre en su muñeca.

- Me pregunto qué ropa estara usando - Rebekah golpeó sus uñas contra la mesa, ajena a las malas miradas que ambos hermanos le dirigieron - Gris claro no es una buena elección para un lunes en la mañana y...

- Bekah - Freya soltó una ligera risa mientras señalaba a Elijah con la cabeza - No creó que nuestro hermano esté realmente interesado en su ropa.

- Claro que no lo está - Kol soltó una carcajada exagerada, disfrutando del tensó estado de su hermano - Nuestro honorable hermano seguro está pensando en las mil formas en que desea quitarle a esta pobre chica la ropa y lanzar sobre ella varios siglos de experiencia - Kol dio un trago a su vaso de Jack Daniels - También la historia de un par de almas gemelas más antes de ella y...

- Kol - Elijah se levantó del sillón donde se encontraba, hablando por primera vez en horas - No juegues con mi límite, estoy seguro de que hoy no estoy de humor - Elijah acomodó las mangas de su traje, ocultando con facilidad el nombre en su muñeca - Ahora si me disculpan necesito un poco de aire, ha sido una mañana... Diferente.