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Entras en la habitación haciendo resonar el tacón de tus botas de cuero, pasas a su lado sin mirarlo, no hace falta, sabes que está de rodillas con la cabeza gacha, desnudo, vibrando en su podría piel y desesperado por tu toque
Toda su postura se tensa cuando te acercas, expectante, pero lo ignoras siguiendo de largo hasta tu silla
Más que una silla es como un trono, sabes que cuando te sientas en ella eres una reina y todos deben adorarte, sobre todo el, tu sirviente tu súbdito leal .
- hola perrito- dices con voz sedosa
El hace el amago de levantar la cabeza pero se cuida de no hacerlo
+Hola mi ama- responde despacio, emocionado
-acercate perrito- hace el amago de pararse- Nono ya sabes cómo
Empieza a gatear hacia ti, despacio, moviendo sus caderas insinunadose
Tus manos pican por golpear su carne y eso haces cuando llega hasta ti, le das una bofetada que colorea su mejilla de rojo
Elevas tu bota con el tacón cerca de su cara
-limpia- empieza a lamer la lentamente, con paciencia recorriendo cada parte, lo hace porque sabe que te hace sentir poderosa y solo puedes pensar en lo vas a ponerlo a chupar después
Cuando te aburres lo empujas con la punta de tu bota hasta que queda recostado y te sientas a horcajados sobre el, meciendo tus caderas para torturar su polla, sabiendo que con el anillo no puede correrse. Sigues entrenando lo en ese sentido para al fin ser la dueña de todos sus orgasmos y su placer.
Avanzas hasta que te sientas en su cara y no hace falta decirle que empiece a chupar, lo hace con devoción, su pene se está poniendo morado de lo duro que está.
Después de correrte te levantas y abrochado su correa al collar, lo llevas hasta la pared y la enganchas en un gancho. Te pones tus guantes de látex, los negros que llegan un poco más arriba del codo, y azotes su trasero varias veces hasta que toma un poco de color, es solo una preparación para lo que viene después.
Te alejas y vas por tu paleta favorita, la que tiene tus iniciales y que las deja marcadas y calientas su culo a golpes hasta que es todo rojo, el no para de gemir está sudado y despeinado mientras las lágrimas surcan sus ojos y bajan por sus mejillas, pero no pode que te detengas,no, el agradece cada golpe que le das y ruega por más.
Al terminar lo levantas y lo atas en la cama, con la cabeza pegada al colchón y el culo en alto, bien sujeto por qué lo necesitas bien quieto para lo que sigue
Vas a la cocina y regresas con unos hielos, empiezas a pasarlos por sus nalgas y gime de placer y alivio, hasta que llegas a su pene y lo sostienes ahí hasta que se derrite por completo, gime desesperado y ruega
+Por favor por favor ama-
- que es lo que querés perrito?- tomas tres o cuatro hielos y con tu mano los envuelves al rededor de su dureza haciéndolo gritar de dolor y placer
+Ama, ama por favor, porfa necesito correrme - te ries burlándote y azotes su dolorido trasero
-y pensas que ya te lo mereces? Jaja falta tanto perrito-
Cuando terminas con el hielo te alejas y Tomás tu bastón favorito
El lo ve y sus ojos se abren con terror, sabe que va a doler demasiado, solo lo usaron una vez y no lo soporto, te agachas junto a su cara y le hablas con voz tranquila
-bien perrito, esto vamos a hacer, voy a darte solo tres azotes con este, solo tres, pero vas a decirme tu palabra si es demasiado, entendido?- lo miras a los ojos para que vea que es serio
+ Si ama, por favor hágalo- te mira con anhelo y te alejas, te posicionas y das el primer golpe, preciso y contundente
Tu perrito grita desesperado y llora
+Gracias ama
Le das un minuto antes de dar el segundo un poco más fuerte, más gritos y llantos antes del tercero el más fuerte de todos, lo das y quietas automáticamente el anillo.
Se corre fuertemente y cae sin fuerzas.
Lo desatas y lo dejas regresar
- eso perrito fue un premio por aguantar tan bien
+ Gracias mi ama
Lo dejas unos minutos más antes de llevarlo a la cruz y atarlo de frente a ti, le colocas un amordaza de aro antes de irte y regresar con una vela y un encendedor
- hagamos un poco de desastre sobre ti perrito- le dices mientras enciendes la vela, primero sola la pasas cerca de su piel, para que pruebe su calor y cuando se derritió lo suficiente tiras toda la cera de golpe sobre uno de sus pezones. Grita y gime y la saliva se desliza fuera de la mordaza bajando por su cuello hasta el pecho
Empiezas con el otro pezón dejando caer gotitas y te agachas a la altura de su pene
- recuerda no correrte- le dices un segundo antes de engullir su pene de un bocado, lo chupas haciéndolo gemir hasta que sientes que está a punto de correrse, entonces te alejas y vuelvas en su cabeza toda la cera que se acumuló, grita y lágrimas caen de sus ojos mientras te ries.
Cuando te aburres de esto vuelves a pasaron a la cama pero esta vez atas sus extremidades a los cuatro postes de la cama y vas por tu juguete favorito( y el suyo también) tu strap de veinticinco centímetros, lo lubricas antes de penetrarlo de una estocada y empezar a embestir sin darle tiempo a acostumbtarse, no lo necesita ya está gimiendo loco de placer. Decides que es suficiente y cunaod vas a salir se te ocurre otra idea y solo te desprendes el strap dejándolo en su interior y de una te sientas en su polla para empezar a saltar.
Quitas su mordaza
-quieres correrte perrito?-
+ Si ama por favor por favor
-entonces ruega- le dices con una mirada malisiosa
+ Ama por favor por favor se lo ruego
Lo ignoras mientras sigue rogando hasta que estás a punto
- puedes correrte perrito
Se corren al mismo tiempo

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