El gran final

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¿ACEPTAS?

Autora: Clumsykitty

Fandom: Marvel MCUoso/Omegaverse

Pareja: Magicshield (StrangexSteve)

Derechos: a ser libreeee.

Advertencias: esto es un Omegaverse, así que hay cosas del Omegaverse, combinado con la trama de la película "La Propuesta", por lo que hay incidental comedia romántica para el fluff de nuestras vidas. Dicho esto, pues entonces a disfrutar de esta locura. Una historia de encargo.

Gracias por leerme.


*****


El gran final.



Wong sonrió, meciéndose en esa cómoda silla que le pertenecía a Strange ausente de momento porque había avisado que llegaría tarde. El editor miró las dos fotografías que ahora decoraban el siempre pulcro escritorio de su amigo, en una estaba este junto a Steve en su boda, la segunda y real allá en Sitka. La otra, más reciente, era de los dos cachorros que llevaban el apellido Strange. Sí, el tiempo había sanado ciertas heridas en el orgulloso Alfa, además del poder de convencimiento de Steve para que terminaran adoptando un par de hermosos pequeños traviesos, un niño y una niña. Arnie y Christine, eran sus nombres. Primero habían adoptado a Arnie, para convencerse de que ambos tenían madera de padres, luego fue el propio doctor quien sugirió adoptar una pequeña.

—Ese es mi lugar.

—Buenos días a ti también, Stephen.

Este negó, quitándose su abrigo que puso en el perchero, dejando su portafolio sobre la mesa, observando a Wong quien parecía no tener intenciones de moverse de su silla.

—¿Qué tal fue? —preguntó este.

—Maravilloso, ganó una medalla, segundo lugar.

—Auch por ti.

—No, estoy orgulloso de él.

—Pero ¿qué estoy escuchando? ¿Stephen Strange aceptando un segundo lugar de la nada?

—Gracioso.

—La paternidad te ha cambiado.

—Tú eres su padrino.

Wong se carcajeó, levantándose al fin de la silla que cedió a Strange con una reverencia algo burlona hacia este al hacerse a un lado.

—Quién dijera que un día estarías tan encantado de las actividades infantiles cuando alguna vez me pareció escucharte decir que jamás en la vida ibas a prestar atención a los mini adultos escandalosos que lo único que sabían hacer era devorar cantidades insanas de azúcar y destrozar todo cuanto estuviera a su paso.

—En eso último no me retracto.

—Oh, pero sí Arnie y Christine son unos amores. Y yo sé que tu consentida es Christine, eres ese papá Alfa sobreprotector típico primerizo.

—También es tu ahijada consentida.

—Chist, hablamos de ti.

Con una mirada a esos dos retratos, Strange tomó asiento apenas si despidiendo con un gesto de la mano a Wong quien se retiró para atender sus propios pendientes. Ambos estuvieron entretenidos, pero más el doctor quien apuró a sus dos asistentes porque deseaba salir más temprano ya que había prometido pasar por sus dos hijos a la escuela. Sonrió cuando el reloj anunció la hora esperada, casi corriendo al salir dando las últimas instrucciones para que siguieran trabajando en su ausencia, despidiéndose de un Sam Wilson quien ahora también era un editor. Los dos cachorros ya esperaban vigilados por sus maestras cuando llegó su padre por ellos, saludándolo cada uno con un beso en su mejilla.

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