𝟶𝟹. 𝚝𝚑𝚛𝚎𝚎

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— ¿cuanto dormimos, amigo? – un somnoliento Rodrigo habló. — aún quiero dormir más.

Iván rió ante la voz adormilada de su amigo, y por esta vez, Iván le correspondió el abrazo.

— ya, dejáte de ser un nene, ya son casi las cinco amigo hay que levantarnos que en dos horas me toca prender stream y estoy hecho poronga. - Iván rió ante su propio comentario. — levantate pelotudo. - Iván agarró a Rodrigo como pudo y lo tiró de la cama mientras este ni se inmutaba. Spreen se despisto solo unos segundos al reirse de su amigo ahora tirado en el piso que no se dió cuenta cuando este tambien lo estaba. Carrera lo había agarrado y había caido de culo al piso. la impresión en la cara de Iván era notoria, pero la risa del contrario lo sacó de su transe.

— ay amigo sos un tarado te amo. - dijo Rodrigo entre carcajadas.

— yo no. 

—  viste como te ponés de pelotudo. - Rodrigo lo miró enojado.

— es joda. - dijo Iván mientras reía. — mentira no lo es.

Rodrigo se tiró encima de este en un abrazo.

— fuera de joda, te amo una banda. – dijo Rodrigo, oliendo delicadamente el aroma del contrarío, olía a café, no muy fuerte, si no a café con leche y mucha azúcar de esos que te dan diabetes al tomar un sorbo, era cálido, era agradable, Rodrigo amaba estar cerca de Iván, tanto que esto de estaba volviendo una adicción para él.

— levantáte de encima mio pelotudo, sos re gay la puta madre. – dijo Iván mientras reía.

— vos me hacés gay la concha de tu madre, lindo de mierda, sos re bonito con tus pestañitas de mierda, que enojo boludo.

Iván sentía sus mejillas calentarse ligeramente, sí, Rodrigo siempre era así de cariñoso, pero... ¿por qué se sentía diferente?

— ves que sos un gay de mierda.

Rodrigo rió. — re homofobico. – soltó algunas carcajadas más. Spreen le sonreía dulcemente.

— vamos a comer algo, te parece un starbucks? – Iván murmuró.

— como decirte que no amigo.

[...]

— tengo un hambre. – farfulló Rodrigo mientras se sobaba la panza

— coméme la pija.

— uff, cuando lleguemos al depa.. – Carrera rió por la expresión que tenía Iván.

— Iván y.. Juanito alcachofa. – dijo un chico no mayor que ellos con tono decepcionado después de unos cortos minutos.

— ¿por qué nunca decís Rodrigo cuando vamos a comer a algún lado pelotudo? – dijo Iván mientras reía, su sonrisa era radiante.

— es chistoso amigo.

se dirigieron a unas mesas alejadas. ambos tomaban tranquilamente, sin hablar, sin ruido, sin sonidos, pero no era incómodo, era realmente acogedor, estar con la persona que amas... ¿amar?

Rodrigo miró a Iván, estaban en el segundo piso de la cafetería, al lado de una ventana. el sol estaba presente siendo el mejor amigo de Carrera cuando salía con Iván, porque este último siempre se veía maravilloso con los rayos de sol en el rostro, tan perfecto, delicado, hermoso. él sentimiento era inefable cada vez que estaba con Iván era simplemente... más que perfecto.

— Iván. – exclamó Rodrigo, algo nervioso, estaba nervioso, se notaba a kilómetros.

Iván no se molestó en mirar ni decir nada más que un "mh?" en forma de que estaba escuchando.

— che, Ivi. – murmuró Rodrigo nuevamente.

esta vez Iván lo miró confundido, sacando su vista de la ventana para mirar a un Rodrigo algo sonrosado, algo despeinado, algo lindo, como siempre, realmente. Iván ladeó su cabeza sin quitar su expresión dulce y sencilla.

— dime, Carre.

Rodrigo lo miró a los ojos con una mirada penetrante, no tanto para ser intimidante, pero lo era.

— me gustaría que pasáramos más tiempo así. – rió ante lo homosexual que sonó su comentario. — solo los dos, ya sabés, me gusta mucho tu compañía. – sonaba natural, justo como Carrera quería que sonara.

los ojos de Iván se abrieron levemente.

— amigo creo me estás haciendo gay, podés dejar de ser tan lindo? – dijo Rodrigo algo enojado segundos después, rompiendo la leve tensión del momento.

Iván suavizó su rostro y luego rió.

— a mi también me gusta mucho tu compañía, Rodri.

Rodri, Rodri, Rodri, Rodri..

¿desde cuando me decís Rodri, Ivi? – rió.

— desde... ¿ahora? – Iván se quedó algo confundido por unos instantes, dijo el "Rodri" sin pensarlo. — se te está enfriando el café pelotudo, que creés, ¿que no me doy cuenta como me mirás? tomáte el café amigo que lo pagué yo. así que Iván sabía que Rodrigo lo miraba, pero realmente no le importó mucho, solo rió y tomó de su café.

siguieron hablando de diferentes temas, cruzando miradas y leves roces, hasta que fueron interrumpidos.

¡Iván!

— ¡Iván!

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