Garden 𑁍Nomin 𑁍

19

Jeno había decidido que sería una maravillosa idea desayunar aquel día con Jaemin, sabía que faltaba exactamente un día, y lo darían de alta, estaba feliz por él, y su sonrisa lo decía todo.

- Abre grande -Jaemin se sonrojo, pero había obedecido, y Jeno deposito el ultimo bocado en la boca de Jaemin, la enfermera  Bae había preparado panqueques.

- Jeno, puedo comer solo...

- no me reclames solo aceptarlo

Había estado practicando el como se lo diría, pero no sabía como reaccionaría, y eso era lo que lo ponía más de los nervios, Jaemin había logrado tener un poco más de equilibrio, aún así utilizaría un bastón por unos cuantos días más, pero ya estaría en su casa, con su madre, prácticamente para Jeno sería casi como una despedida.

- ¿Sabes, Jaemin? He querido hacer algo todo este tiempo, y más cuando te vi.

- ¿Qué? -Jaemin ladeo un poco su cabeza estaba curioso.

De inmediato Jeno lo tomo de su mano y lo jalo para que se levantara, Jaemin sintió que de nueva cuenta iba a caer, pero no, sintió el brazo de Jeno aprisionando su cintura y acercándolo demasiado hacía él, Jaemin era unos centímetros más bajo que Jeno.

Jeno levanto un poco a Jaemin e hizo que los pies de Jaemin quedaran exactamente encima de los suyos.

- J-Jeno- Jaemin  estaba avergonzado, pero también con algo de temor, estaba prácticamente su peso encima de los pies de Jeno, no quería lastimarlo-. D-deja de hacer esto, te voy a lastimar, peso demasiado.

- ¿Por qué dices eso? Eres como una pluma, tan liviano que me encanta.

La mejillas de Jaemin de inmediato se encendieron ante tal comentario, su corazón había latido desenfrenado de un momento a otro, todo eso causaba Jeno, Jaemin paso sus manos por los hombros de Jeno.

- No puedo caminar aún, ¿por qué haces esto?

- Quiero bailar contigo.

- Jeno...

- Solo déjamelo todo a mí, solo de un lado a otro, un ligero balanceo, y nuestras miradas conectas, eso es lo único que quiero.

Pero claro para Jaemin era algo costoso el conectar miradas con Jeno, y es que los ojos de Jeno brillaban en un anhelo tan hermoso que podía perderse en ellos por mucho tiempo, y eso era lo que le gustaba, habían hecho justo lo que Jeno había dicho, un suave balanceo, y sus miradas conectadas, perdiéndose uno en el otro, y sin que nada más importará en esos momentos.

- Jaemin, haz hecho lo que nunca creí experimentar en mi vida, me he enamorado de ti...

Cuando dijo aquello, no pudo evitar sentir como lo había recorrido una felicidad inmensa desde su pecho y llegar hasta todo su cuerpo, una vibra tan hermosa y tan inexplicable.

- Pero... -Jaemin miro a Jeno-, también he querido decirte algo más, me has preguntado muchas veces la enfermedad que cargo, y he evitado el tema por el simple hecho de que no quería que estuvieras triste, o que me miraras triste, no necesito lastima, eso ya no va conmigo -hizo un pausa en donde trago saliva para continuar-, tengo leucemia.

Jaemin no quería llorar, pero sentía que quería hacerlo, paso saliva para deshacer el nudo que se había formado en su garganta en aquel momento, quería llorar, pero en lugar de eso, abrazo a Jeno, y el le correspondió.

- Me operaran cuando salgas de alta -siguió el de tez pálida-, sino sale bien, solo quiero que me confirmes algo, ¿estás enamorado de mí?

El silencio se hizo presente por unos instantes en aquella habitación, pero de inmediato Jaemin se separo un poco del abrazo que había formado y miro a Jeno, podía sentir su aliento cera de sus labios, estaban tan cerca, y no le molestaba, le gustaba esa cercanía.

- Lo estoy...

Jeno sonrió al escuchar eso, era correspondido, y eso era lo que más le encantaba.

- ¿Puedo besarte? -Jaemin parpadeo un par de veces, sintió su corazón latir desenfrenado ante tal pregunta.

Solo basto un simple asentimiento de parte de Jaemin, para que por fin ambos acortaran la poca distancia y unieran sus labios en un beso en donde podían demostrar el amor que habían estado guardándose el uno por el otro en esos meses de convivencia.