Ayer [Namjin]

( 03 )

Un golpe fue estampado en el rostro de namjoon.

— ¿qué se supone que haces aqui? — preguntó yoongi molesto.

—vine a hablar con jin— respondió mientras se levantaba.

— a enmendar tu error.

— eso es algo que a ti no te imcumbe — respondió nam con sinismo.

— maldito idiota — refunfuño yoongi apretando la mandibula — pues fijate que no vas a pasar — habló con el mismo sinismo que namjoon la había hecho segundos atrás.

— tú no eres quien para decirme que hacer y que no.

— maldito imbe..

— yoongi — sus palabras fueron cortadas por la voz de jimin que venía junto con su hermana.
— sera mejor que te vayas nam, no quiero que haiga problemas y menos a estás horas del día — sin mencionar que era muy temprano para amargar el despertar de algún vecino.

— yo sólo quiero hablar con jin — suplicó.

— que ya te dije que no.

— nam — está vez fue jin quién habló, estaba envuelto en una mantita azul, con los ojos hinchados de tanto llorar.

— amor yo...

— no tienes derecho de llamarlo amor después de lo que le hiciste ayer — reclamó yoongi.

— yoongi — el mencionado volteó a ver a su mayor — necesito hablar con él — se limitó a asentir, mientras que jimin y su hermana entraban de nuevo.

— caulquier cosa nos avisas — jin asintió a su propuesta — y no dejes que te engañe, si no hablaré muy seriamente contigo después — le susurró.

— no te preocupes, esta vez no.

Por último yoongi cerró la puerta, no sin antes quedar detrás de ella, por si algo pasaba lo podría escuchar.

Su hermana y su novio sólo negaron, se parecia a las viejas chismosas de su colonia que vigilaban mejor que una cámara de seguridad.

— jin — habló namjoon cortando el silencio incómodo que se estaba formando.

— habla yo te escuchare.

¿Era tan buena persona jin como para escucharlo?

— lamento que hayas visto todo eso ayer, en realidad yo no quería, tu sabes, besarla, pero siento que estabamos tan distantes y tenía que encontrar como distraerme, se que es mi culpa y todo lo demás, pero en realidad tu trabajo y el mio no nos dejaban vernos como antes.

— ¿ya acabaste? — preguntó jin serio.

— sí, y gracias por escu...

— si en realidad no querías besarla, la de la iniciativa sería ella y no tú, en todo caso no la llevarías a tu departamento... carajo namjoon, de seguro ni siquiera te acordaste de nuestro aniversario, ¿no?

— no, no me acorde hasta que vi to...

— tal vez estaba distante por mi trabajo, pero yo no te haría lo que tu me hiciste — jin estaba reteniendo todas sus lágrimas, tanto también insultos, pero no, no podía rebajarse.

— lamento haberte herido en un momento importante para ti.

— osea que sólo para mi —esta vez jin ya soltaba sus lágrimas retenidas — ¿y tú?, ¿nunca fue importante para ti?

Namjoon solo agacho la cabeza, como pensando que diría, después de todo no estaba seguro de que jin lo perdonara.

— vete — cuestiono jin, haciendo que alsara su cabeza.

— ¿pero..

— ¡sólo quiero que te largues!, al parecer nunca valoraste lo que yo te di, lamento mucho no ser suficiente para  ti... Ah, y por cierto ten... no lo necesito más — dijo mientras le entregaba el anillo.

El anillo que le había regalado en su primer aniversario, el que juró cambiarlo el día en que se casarían, un sello de amor que prometía otro futuro más prospero, que en realidad se termino o más bien nunca llegó.

Ese amor profundo que se tenían se acabo, de un día para otro, el amor que se juraron acabo, ese amor que muchos envidiaban, que anhelaban tener, era una farsa ante los ojos de jin, de kim seokjin.

Mentiras que se dedicaban, todos aquellas llamadas que él no contestaba, por que el telefono se encontraba apagado o simplemente no nacía el placer de responder al llamado.

Es algo que suele pasar, pero jin no se lo merecía, no se lo merecía ya que él había dado todo su amor, todo su amor a la persona equivocada.