Apenas habíamos llegado a Corea del Sur, un sueño para mí poder promocionar en esa región con gran potencial a nivel internacional, todo el mundo sabe que corea se volvió el centro de la cultura musical en asia, todo un sueño para cualquiera que quiera tener mayor rango en la industria, Ohm sabe de este sueño, sabe de la importancia de este viaje, nos han dado un cuarto para los dos, no puedo quejarme, es decir, es un precioso hotel, tenemos alberca, y todos los servicios que podamos imaginar, pero algo dentro de mi pecho está temblando, la ansiedad está volviendo a mí, como aquellos días en los que se volvieron oscuridad y caí en depresión, no sé si sean los nervios, mañana estaremos en un programa a nivel nacional, y estoy temblando de solo pensar, es decir, preparé algunas frases, ¿pero...será suficiente?
La silueta era de él, llevaba solo puesto el pantalón de mezclilla, se secaba el sudor con una toalla mientras me miraba,
-¿Qué me ves?- interrogo con una sonrisa de lado a lado, negué desviando la mirada hacia otro punto
-nada, solo que te ves bastante bien- confesé rodándome por la cama, Ohm camino hacia mí para sentarse sobre la orilla de la cama, me observó y le di la espalda para que no me mirara más, sentí sus manos pasearse por mi espalda, haciendo figuras amorfas,
-¿hace cuanto que no hacemos el amor?- me dice, siento las mejillas arder,
-No lo recuerdo-solo respondo, la cama se hunde chillando unas cuantas veces mientras siento el peso caer a mi lado, siento sus manos rodear mi cintura mientras despliega los besos por mi cuello, sensible, me remuevo de un lado intentando no dejar escapar ni un solo quejido,
-e-el manager puede entrar- me excuso, pero Ohm me ignora,
-le puse seguro a la puerta- me informa dándome vuelta, sus manos bajan desde mi pecho hasta mi abdomen, apenas toca el borde de mi pantalón cierro lo ojos aguantando la respiración, desabrocha mi bragueta, -Estas muy tenso, necesitas un poco de mi ayuda - menciona a lo bajo, pareciera que su voz se escucha divertida, es algo que no puedo ocultar, me conoce mejor de lo que ambos hubieramos deseado, me frota con una de sus largas manos por encima del bóxer, trata de besarme lo que hace que ahí se ahogue un jadeo, me gustaba el movimiento de su mano, me abrazo a su cuello para seguir besándole, buscó su lengua para succionarla, a Ohm le agrada la rudeza con la que suelo tratarlo, siempŕe lo notó y adora que pueda resistirme un poco a su dominación excesiva.Abre mis piernas con ambas manos acomodándose sobre estas, desde esa posición puedo notar su cortante respiración, aunque es él quien esta haciendo todo el trabajo necesario para entrar en calor, también esta siendo sometido por sus pensamientos lujuriosos, bajo mis manos hasta su pantalón ayudándole a que se despojará de estas, las ropas quedaron en el piso en cuestión de segundos, me esforcé para alcanzar con mis labios sus tetillas ya bien despiertas, olas muerdo con desesperación, una por una, está excitado, igual que yo.
Ohm echa el cuerpo hacia atrás gimiendo como antes no lo había escuchado, normalmente cuando teníamos sexo era en lugares en donde no podíamos expresarnos tan abiertamente, pero ahora, era un hotel, lejos de Tailandia, eramos unicamente él y yo en esa habitación, el deseo que habíamos aguardado surgía, en ese mismo instante, nos miramos unos segundos mientras el deseo se reflejaba en nustros ojos, por unos instantes respiramos agitados, pero no demora mucho tiempo antes de que me tome por los hombros para recostarme sobre la cama, abre mis piernas lo más que pudo, perdiendose entre mi entrepierta, sentí sus frias manos posarse sobre mi falo visiblemente despierto, sus largos dedos recorrieron desde la base de mi miembro hasta la punta, enseguida sus labios se posicionaron en el glande para succionarlo, cerré los ojos escuchando la succión, mis mejillas se sonrojaron ypronto comencé a jadear, se sentía tan malditamente bien que no queria que se detuviera, traté de calamar mi corazón que se agitaba acelerado al compás de mis respiraciones.
Coloqué una mano sobre sus cabellos, acariciandole, mientras que con mi pie buscaba encontrar su entrepierna para acariciarla de ese modo, no podía solo yo estar duro, Sonrió cuando me encontré con su nada despreciable bulto, pero Ohm era el tipo de chico desesperado, y yo era de quienes disfrutaba desesperarlo, y él lo sabe, pero no quiere jugar esa noche,
Me alza un poco el cuerpo encontrandose con mi entrada la cual no duda en lamer, sentir su lengua recorrer mis paredes me tiene con la cabeza vuelta loca, me aferró fuerte de las sabanas porque temo lastimarle los cabellos, mi visibilidad empieza a nublarse con el pasar de los segundos, siento como mi cuerpo se electriza con solo sentir la punta de su lengua, Ohm sabe lubricar bastante bien, a veces me pregunto si aprendió con alguien más, me resisto a pensar más porque celoso si soy y mucho, pero su lengua hace el trabajo deseado para que mis celostinos pensamientos desaparecieran, siento que mi entrada se comprimé, segundos después Ohm acercó sus manos a mi rostro para que lamiera sus largos y perfectos dedos, lo cual hice sin precedente y de la manera más sensual que pude
-me encantas- murmura ronco, no evito su mirada pero siento que toda mi cara esta roja, tan roja como una cereza,
-hazlo..por favor- supliqué bajito, metió sus dedos con brusquedad, y después de unos minutos de acostumbrarme a sus dedos, se posicionó con su miembro, primero metiendo la punta, dolía un poco, pero pensar que se trataba de Ohm me hacia feliz, lo necesitaba dentro, quería ser el refugio de mi querido y amado Ohm, no sé porque cuando estábamos en la cama comienzo a tener pensamientos muy cursis sobre nosotros, esta cercanía me hace sentir todo el amor que tengo resguardado en mi pecho y que solo reluce cuando Ohm entrá en mi, tal vez pasan algunos segundos, cuando me embiste con su miembro, los gemidos no paraban en aquella habitación, sus movimientos de cadera eran tan perfectos, mis paredes comprimían su miembro y él gemía de placer justo como lo hacía yo, mi miembro despertaba con solo escucharlo, era tan sensual su voz, y tan potentes sus embestidas, sentí que tocaba mi próstata con cada embestida, Ohm era tan fuerte.
Después de unas cuantas estocadas más golpeando mi próstata se corrió dentro de mí, sentía su semilla fresca resbalar por mis piernas, el sudor en mi frente era muestra de la fuerza con la que ambos disfrutamos, después de unos cuantos movimientos más salió de mi interior, recostándose sobre mi estomago que subía y bajaba inconstantemente, abrí mis ojos de par en par, notando por primera vez que en el techo del cuarto de aquél hotel de Seúl había un gran espejo, podía ver el cuerpo desnudo de mi amante, recostado sobre mi, podía verme a mí mismo, mi rostro, mis ojos ternían un brillo peculiar que no tenía antes, era de satisfacción, de gratitud, de felicidad, pero sobre todo de amor, es decir, había hecho el amor con Ohm y aquél espejo había sido testigo de nuestro apasionado encuentro.
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ONESHOT'S OHMNANON
Historical Fictionpor aquí dejaré historias que me han inspirado estos chicos. ❤💚