-si no vas a pagar la deuda entonces morirás-dijo un tipo en u vietnamita vacilante mientras seguía pegándole con un gran tubo en la espalda a un chico, el joven se dobló tratando de contener los golpes lo mejor que pudiera, -agárrenlo y húndanlo en la poza- dijo él que parecía ser su líder en idioma mandarin, dos hombres de gran altura alzaron el chico todo ensangrentado del rostro y lo arrastraron hacia la poza, hundieron su cara en el agua y después de algunos pataleos el forcejeo ceso, el chico quedó inconsciente unos minutos debido a la falta de aire, los cuatro tipos rieron a grandes carcajadas y se retiraron a pie a las afueras dejando el cuerpo inerte del chico, después de varios minutos el joven que llevaba por nombre Korapat se despertó, sentía todo el cuerpo apaleado, cerró los ojos mientras saboreaba el sabor de la sangre en su paladar, se quedó recostado un poco de tiempo más, y después unas gotas de lluvia comenzaron a caerle, se levantó con lentitud y tratando de retirarse de ahí notó que su pie no le daba para caminar, así que fue arrastrándolo, con grandes problemas llegó a la carretera pero la lluvia se soltó, él no conocía esos lugares, era inmigrante, había escapado de la guerra en Vietnam, hambre, muerte y desolación, obligaro al joven y apuesto chico a recorrer a traficantes chinos, quienes supuestamente le ayudarían a salir de su país natal le estaban cobrando el doble de lo acordado y al no poder pagar la deuda había sido víctima de ellos, no conocía la ciudad, ni el idioma, no sabía hacia donde caminar, estaba perdido, no sabía exactamente cuánto había caminado, pero se desplomó por el suelo.
Pawat había salido muy tarde del trabajo, había tomado una ruta alterna para salir más rápido y evitar según él el tráfico, la lluvia había evitado que avanzara a mayor velocidad, así que manejo con mucha más precaución, mientras su auto alumbraba con los faros la ruta, notó que en el camino había un cuerpo tirado, frenó de improviso, revisó sus espejos y analizó si alguien más estaba ahí, dudó e internamente se lamentó haber tomado aquella ruta, donde no había muchas casas, estaba desolado y había escuchado un montón de historias de asaltantes, ¿esta vez sería él la victima de robo?, resopló y bajó del auto enfocando con la luz de su auto al cuerpo, después de todo él era un médico y tendría que hacer lo que debía hacer, lo empujó con el pie y después se inclinó un poco, tocó las muñecas de ese zarrapastroso y notó la pulsación un poco débil, le miró, horrorizado por lo que había notado, su mirada totalmente perdida y el ojo muy inflamado, miró a su alrededor y con rapidez cargó el cuerpo, aun podía salvarlo, abrió la puerta trasera de su auto y colocó al chico ahí dentro, después emprendió la marcha y se fue con más rapidez a su casa.
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ONESHOT'S OHMNANON
Ficção Históricapor aquí dejaré historias que me han inspirado estos chicos. ❤💚