[Completo] La Puerta De La Penumbra III

Capítulo XII: Discípulo De La Muerte

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Julio 2019, Rusia Unidos.

   Luego de la masacre de la base, Chloé se dirigió de vuelta al hotel, al llegar se sentó en el comedor, le tomó pocos minutos caer en la realidad, al primer momento donde su mente se relajó recordó que en los últimos dos días había perdido todo lo que le quedaba, su Jorge, su gran amor, el chico que salvó en una tierra corrupta, con quien luego intentaría durante años cambiar el mundo, rompió en llanto sobre la mesa, el dolor era inmenso.

   Chloé recordó las últimas palabras de su padre; "Se buena Chloé... Simplemente... Se buena mi niña...". Aquellas palabras la contenían de comenzar una cacería como la que René había iniciado, sabía que su padre luego de todo lo que le enseñó, se sentiría decepcionado de ella, y sobre todo Jorge, quien siempre quiso que ella pudiera dejar atrás ese sangriento pasado. Se tomó las horas que necesitó para llorar a Jorge, que a pesar de que no eran suficientes, ella creía que era momento de hacer lo correcto, e intentar detener a René antes de que ocasione otro desastre.

   Chloé volvió a la base y salvó todo el armamento que pudo llevar consigo, incluso balas de vecrato, el metal creado por el ejército de Ivanna, para prepararse a enfrentar a René, algo que deseaba no tener que hacer, pero las circunstancias estaban demostrándole que no tenía otra opción.

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Julio 2019, Noruega.

   Tres días más tarde, René ya se encontraba en Noruega, acercándose al portal, donde no sabía exactamente qué se encontraría, pero si sabía que se llevaría por delante cualquier cosa que se cruce en su camino.

   Desde el mundo de los Daikanos ya preparaban la perla para insertarla en la ranura, mientras Robbie con ayuda de Carla acomodaban la secuencia de las ranuras para el mundo de aquel super-soldado en la década de los cincuenta, hasta no modificar la última runa el portal no se conectaría con el destino nuevo. El proceso llevaba un tiempo, ya que Robbie intentaba recordar las coordenadas de aquel mundo, debido a que Shark se las había pasado en aquella época que ambos colaboraron, pero por miedo a que alguien acceda a aquel probable suero, le parecía un riesgo y sólo se guardaban en su memoria.

   Desde el otro lado del portal custodiaban cuatro guardias la misión, tenían la orden de informar cualquier cosa que sucediera, incluso antes de realizar ellos alguna acción en respuesta.

   La entrada de la cueva estaba en el inicio de un bosque de pinos gruesos y altos, que permitían que llegase poca luz al suelo. De entre esos pinos dos de los guardias lo vieron llegar, un hombre con un traje táctico bastante distintivo, placas de metal oscuro para reforzar las partes más vitales del cuerpo, y un casco que cubría todo el rostro, al cual podían verle unas lentillas finas, era liso y la visión se complementaba en el interior con una pantalla holográfica.

   Los enormes guardias de casi dos metros de altura se prepararon con sus lanzas mientras que uno de ellos atravesó el portal y comunicó de la situación a Qira, Robbie y Trako que se encontraban trabajando en la misión. Robbie convenció a Qira de que continuara con las coordenadas al poder recordar la última runa, sólo quedaba presionarla así se activaría, mientras, él acompañaba a Trako a ver que sucedía del otro lado del portal.

   Al cruzar hacia la otra Tierra, la persona estaba detenida a unos metros de los guardias, como si esperara a alguien, en cuanto vio a Robbie su mirada sería dirigida a él, junto con unas palabras.

   —Así que es cierto... Ahora juegas a conseguir más super-soldados Robbie —dijo con la voz apenas distorsionada por la máscara.

   —¿René?... ¿Cómo es que estás aquí? —sorprendido Robbie se acercó hasta donde estaban los guardias para hablar con René.