As Potter is to Snape

Capítulo 45

—¿De vuelta?—preguntó Harry con la mayor inocencia posible.

—Sí, de vuelta—dijo Snape, con un tono cortante—Acabo de tener una conversación bastante interesante con Malfoy, Crabbe y Goyle, y los tres parecen tener la impresión de haberte visto en Hogsmeade. O mejor dicho, dicen haber visto tu cabeza. ¿Quieres decirme cómo es posible que hayan visto tu cabeza en Hogsmeade cuando tu cabeza no tiene permiso para estar en Hogsmeade?—.

Harry tragó con fuerza, pero no había llegado hasta aquí sólo para entregarse ahora.

—No lo sé. He estado aquí. Estuve contigo esta mañana—.

—Así que Draco sólo está inventando mentiras, ¿verdad?—.

—Bueno, no sería la primera vez, ¿verdad?—Harry replicó.

—Harry—Snape se cruzó de brazos y lo fulminó con la mirada.

—No estoy mintiendo. He estado...—.

—¿Qué es eso que tienes en el bolsillo?—Preguntó Snape de repente, señalando el borde del mapa que veía asomar por el bolsillo de su sudadera.

Harry lo sacó—Es sólo un pergamino extra—.

—Y ahora te has acostumbrado a llevar pergamino contigo en todo momento, ¿verdad?—.

—Hola a todos—Snape y Harry se giraron para ver a Remus caminando hacia ellos—¿Tienen una reunión en los pasillos?—preguntó con una carcajada, sus ojos brillaban casi tanto como los de Dumbledore.

—Difícilmente—contestó Snape con amargura—Acabo de atrapar a Harry a escondidas. Al parecer, le han visto en Hogsmeade hace un rato—.

Los ojos de Remus se dirigieron a Harry y bajaron al mapa que tenía en las manos. Por un segundo, Harry creyó ver su mandíbula apretada, pero se le pasó rápidamente cuando Remus se volvió hacia Snape—Tonterías, Severus. Harry no pudo haber estado en Hogsmeade—.

—¿Y por qué es eso?—preguntó Snape.

Remus lanzó una media mirada en dirección a Harry y éste, sabiamente, guardó silencio, preguntándose qué iba a decir Remus.

—Porque ha estado conmigo. Hemos estado repasando su ensayo sobre los vampiros durante la última hora. Envié a Harry a buscar su libro para poder mostrarle dónde hacer los cambios. Sólo vine a buscarlo porque llevaba mucho tiempo fuera, pero ahora veo por qué—Remus se rió—Dale un respiro al chico, Sev. No siempre está haciendo travesuras—.

Snape no parecía creer en absoluto a Remus, aunque no le cuestionó al respecto. En cambio, se volvió hacia Harry—¿Es esto cierto?—.

—Sí—mintió Harry inmediatamente.

Snape suspiro—Entra y toma tu libro—Harry se giró para hacer lo que le habían dicho, pero antes de que pudiera decir la contraseña a la Dama Gorda, Snape volvió a hablar: —¿Harry?—.

Harry miró hacia atrás—¿Sí, señor?—.

—Lo siento. No debería haberte acusado—.

A Harry se le cayó el estómago ante esas palabras y asintió rápidamente antes de darse la vuelta y salir por el agujero del retrato.

Tardó en tomar su libro más de lo necesario, pero pensó que lo mejor sería darle a Remus algo de tiempo para calmarse. No estaba seguro de cómo, pero Remus sabía la verdad. Sabía que Harry se había escabullido y aunque lo había encubierto, Harry no creía que fuera a dejar pasar esto.

Cuando volvió a salir, encontró a Ron de pie junto a Remus, con la cabeza agachada. Harry no creía que esto pudiera ser mucho peor.

—Remus, yo...—.