La floristería para Izuku era como un verdadero paraíso entre todo el ajetreo del centro de la ciudad. Era un local espacioso de paredes claras, decorado exquisitamente con un toque rústico que el mismo Izuku le dio al lugar, era como una cabaña inglesa en medio del asfalto.
Aquel fue un día tranquilo. Estaba solo, escuchaba música suave de fondo mientras armaba su octavo ramo del día. Este a diferencia de los otros era más sencillo, un hermoso ramo de rosas blancas ,rojas y peonias blancas. Amaba su trabajo porque las flores le recordaban a su madre y cada ramo que armaba lo hacía con mucho cuidado y respeto por los sentimientos que expresaban. Al final lo envolvió con un listón azul pastel y miró el reloj; pasarían por ese pedido en 15 minutos. Miró hacia el gran ventanal que daba a la calle, eran cerca de las 7:00 de la tarde y ya casi no había gente, lo atribuyó a la lluvia que recién había parado, devolvió la vista al ramo sobre el estante de madera, rosas blancas y rojas ... según un libro que leyó significaban la inocencia, el amor secreto y juntas... el reencuentro. Suspiró, tenía la vista perdida entre los pétalos blancos y sonrió al recordar a Tenchan. Nunca espero volver a verlo.
//
— Aún no lo creo... ¿enserio eres tú?— Dijo Izuku. Lo miró de arriba a abajo, y el brillo de alegría destellaba en sus ojos. Puso atención especial en el rostro, habían pasado unos cuantos años pero aún podía reconocerlo, para él las cicatrices en el rostro de Tenko no existían, él veía más allá de eso, sus ojos rojos, la nariz recta y por supuesto el pequeño lunar bajo los labios cerca de la barbilla. Le pareció tan alto y diferente y sobre todo ese color azul de cabello que tanto lo hizo dudar, azul pálido, raro pensó Izuku.
— Vamos a tomar algo — Tenko señaló tras él con una leve sonrisa. Notó que su voz también cambió un poco. Iba decir que sí pero una voz tras él no lo permitió.
—¡Deku -kun! ¿enserio me dejaste atrás? que malo eres ... — chilló la voz de Ochaco Uraraka , su mejor amiga. Ella salió de la multitud de gente, con la respiración agitada y apoyándose sobre sus rodillas, cargaba un bonito paraguas amarillo.
— ¡Uraraka-san! lo siento es que yo...
— uh ¿Quién es ?... — La muchacha miró solo por un segundo a Tenko, pero su expresión dijo todo. Izuku sonría reluciente iba a decirle quién era él pero ella no escuchó nada ni lo dejó continuar, ella veía un joven desaliñado y no pudo ocultar un gesto de aversión que no pasó desapercibido por los dos jóvenes.
— ... no importa — no dejó hablar a Izuku —¡oh qué bonito perro! — Los enormes ojos café de la chica solo se posaron en el esponjoso pelaje del perro y se inclinó para acariciarlo. Tenko miró a Izuku y éste avergonzado se disculpó en voz baja por los modales de su amiga.
—¡Q-qué lindo! como se llama — Dijo Izuku esforzándose por romper la pequeña tensión en el aire
— Mon-chan— Tenko miró únicamente a Izuku. — Entonces... ¿vamos a tomar algo Izuku-chan? — Iba a contestar pero de nuevo ella no lo dejo
— Deku-kun... ¿no tienes que entregar unas cosas más? — Ochako se levantó y se paró junto a Izuku
— cierto... Lo siento, pero ¿puede ser después? Mi turno termina en dos horas — Izuku aferró el ramo de girasoles en brazos y con una sonrisa dijo: — trabajo en la floristería de dos calles abajo.
El chico de pecas le indicó con todos los detalles el lugar exacto y Tenko lo miraba con atención.
— Pasaré por ti entonces, vamos mon-chan.
ESTÁS LEYENDO
Mi Ángel
FanfictionUn día gris y desolado el pequeño Tenko encontró a su luz... a su ángel. Años después él sacara a su pequeño ángel de aquel pozo sin fondo. Izuku padecerá el amor de Tomura. 》Los personajes son propiedad de Kohei Horikoshi 》A/B/O 》Angst , Drama...