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Otro fanfic que no sé cómo continuar pero ya lo escribí :p capítulos cortos.

Puede contener temas fuertes y sensibles.

En una calurosa tarde de verano, oculto en el sótano de una cierta isla plástica ubicada en el punto nemo, un hombre de piel verdosa, líder musical y bajista de una banda londinense, recientemente ha descubierto otras habilidades que posee.

Resulta que es muy bueno creando cyborgs. Solo ha sido necesario leerse algunos libros en robótica y ver videos de YouTube al respecto. Hasta le resultaron útiles sus estudios que adquirió en la prision en el lejano año del 2003 o tal vez 2004, que le sirvieron para obtener su título como doctor.

Murdoc ha estado encerrado en ese oscuro lugar desde hace 14 horas hoy. Apenas ha probado bocado de comida y sus intestinos gruñen anhelando alimento. Esta agotado y siente sueño pero no puede distraerse ahora. Debe terminar este proyecto tan importante para el. Espera que esto sea la salvación de su banda para volver a los escenarios y a crear más música luego de años en el olvido del público. Hace una pausa rápida y se limpia el sudor de la frente. Apesta. En cuanto lo termine debe ir a bañarse.

Con la escasa única luz de una bombilla parpadeante sobre su cabeza, se apresura a atornillar las últimas tuercas en su sitio, sobre aquel cuerpo inmóvil hecho de metal, que se recuesta sobre una mesa de operaciones.

Una vez hecho eso, procede a vestir a su creación con ropa adecuada, como si vistiera el maniquí de una tienda departamental. Le ha puesto ropa de soldado.

Murdoc se aleja unos pasos para admirar lo que él mismo ha creado. No podría sentirse más orgulloso de lo exacta que es su replica a lo original. Ha pasado días en completa soledad, desvelo y reclusión para terminarla y por fin lo ha logrado.

Con una sonrisa torcida y cansada que sus labios logran emitir, se acerca de nuevo, con total admiracion.

Le toma del rostro y le da su primer requerimiento: despertar.—Levántate, mi querido Cyborg. Tu amo te lo ordena.

La máquina ha abierto los ojos que se iluminan con un brillo que se atenúa al pasar de los segundos. Se pone sentado sobre la mesa que ocupa, emitiendo chirridos del metal con el que está hecho. —Ordene, mi amo.-Expresa con frivolidad.

—Oh~, ooohhh~ mi adorado 2D. - Se apresura a darle una caricia en la mejilla, totalmente admirado de lo que observa, y presta atención a cada detalle de aquel rostro pálido y frío. El robot no emite ninguna reacción ante ello, esta estático.—me alegra que estés aquí conmigo. Estuve tan solo. Y te extrañé. - Añade con cierto morbo. —Contigo aquí, todo será diferente y mejor. ¡Traeremos a Gorillaz de vuelta! Sé que no vas a decepcionarme. No podrías hacerme eso. - Le acaricia con cuidado, usando la punta de sus dedos, los suaves cabellos azules hechos de material sintético. El robot no se mueve para nada. —Literalmente, no puedes.-Sonríe una vez más, mostrando unos dientes sucios, tratando de disimular la enorme excitación que siente por dentro.

Cyborg 2D (studoc) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora