De lo poco que fui, a lo grande que me hiciste.
Te veía con ojos diferentes, y te veo.
Porque ahora quien me da los buenos días es la radio, a veces.
No se si leerás esto, si lo habrás visto en alguna de las categorías, si lo tendrás en tu biblioteca sin saber que va para ti o si seguirás viviendo y creyéndote lo que otras voces te han dicho, la que tenía que susurrarte al oído era la mía, ya se que es tarde, es hora de que salga.