-No es aracnofobia-(Frisk x Muffet)

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Viajar de Snowdin hasta el nido de arañas sonaba a otro viaje largo por el subsuelo... Que suerte que Sans se molestó en traerlo, ahorrando así la molestía de caminar tanto.

¿Cómo era capaz Sans de hacer estas cosas? Frisk desearía saberlo también, le sería muy útil últimamente.

-Bueno chico, te dejo por ahora, pero ten cuidado.-Dijo Sans siempre sonriente.-No quiero tener que sacarte de una red de problemas, je, je. ¿Me entiendes? Red, arañas....

Frisk solo se preguntó cuántos chistes de arañas haría el esqueleto desde ahora. Esperaba qué ese fuera el último.

-Bueno, nos vemos chico. Mándale un saludo de ocho manos a esa chica araña.-Dijo Sans, para luego caminar en sentido contrario al puesto de Muffet. El humano sólo vió cómo desaparecía de un momento a otro.

Frisk recordó qué lo mejor sería no hacer preguntas respecto a Sans, así qué siguió con lo suyo mientras se dirigía al puesto de Muffet.

Al llegar al puesto, no sé encontró con Muffet, sólo con algunas arañas que parecían saludarle en su idioma y al monstruo perturbado que sólo se la pasaba mirando una dona echa por la chica araña.

Eso solo lo motivo a seguir buscándola antes de qué alguien más tuviera el infortunio de toparse con ella, aunque ahora qué lo notaba, parece ser qué no pocos desconocían las maneras de negociar de Muffet, pues por algo nadie pasaba por allí.

Frisk caminaba por el pasillo sintiendo como varios ojos lo miraban, sabía que eran las arañas, así qué no tubo el porque tenerles miedo, eran de las pocas criaturas en el subsuelo que nunca intentaron matarlo, lo cuál era curioso, pues hasta una roca lo intento.

-Miren a quien tenemos aquí. Mí cliente favorito.

Frisk miró alrededor al escuchar un susurró más entendible comparado a los chillidos de una araña. El humano levantó la vista y allí la vio, Muffet. Colgada de una telaraña con su juego de te, teniendo algún tipo de picnic con las arañas dónde había también donas y cupcake con diseño de telaraña.

Muffet le sonrió de forma amigable al humano apenas la miró.-Frisk... Que sorpresa verte por aquí.

Frisk no dijo nada, sólo movió su mano en señal de saludo mientras trataba de mantenerse firme, pues se sintió algo tembloroso de repente.

-Estaba tomando algo de te mientras charlaba con las arañas... Quieres... Quieres acompañarme? Bueno, acompañarnos?-Preguntó Muffet mientras se acariciaba el pelo con la mano y se rascaba la mejilla con otra mano de sus seis pares de brazos y manos.

Frisk sonrió ligeramente y acepto la propuesta de Muffet.

Muffet sonrió con satisfacción, para luego moverse entre las telarañas para estar enfrente de Frisk y ofrecerle la mano.

Frisk se seco la manos, pues las sintió sudorosas de repente,  agarró una de las manos de Muffet, quién jaló hacia atrás atrayendolo hacía su telaraña. El chiste de araña que le dijo Sans hace rato paso por su mente mientras era llevado hacía el lugar donde Muffet estába teniendo su picnic.

Muffet le dio permiso para sentarse a su lado, cosa qué el humano hizo sin inmutarse ante estar rodeado de muchas arañas sin mencionar qué algunas parecían estar interesadas en el, pues no parecían tener miedo de caminar sobre su cabeza. Eso no le molestó, pues sabía que las arañas no le harían nada al igual que sabía que Muffet tampoco le haría nada.

Muffet sonrió al ver cómo de pasivo era el humano con sus amigas las arañas. Eran pocas las veces que no encontraba a alguien que no le dieran miedo los arácnido, enrealidad, nunca encontró a nadie mas allá de Frisk.