-No es aracnofobia-(Frisk x Muffet)

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Era un calmado viernes de primavera. Frisk cómo tal ahora estaba haciendo lo de cada mañana. Desayunar una tarta de caracol con su madre adoptiva, Toriel.

-Algo que me gusta de la primavera es que hay más cantidad de caracoles por la zona.-Comentó, Toriel teniendo una charla con su hijo adoptivo quién sólo hizo un ligero movimiento de cabeza.-Y el clima es agradable incluso teniendo a Asgore como compañía la verdad....-Dijo la mujer dejando salir una pequeña risa antes de darle una mordida a un pedazo de tarta.

Frisk sonrió ligeramente. Le alegraba saber qué en estos últimos días su madre adoptiva había dejado de tratar mal a su ex y ahora eran algo así como amigos. Aunque tardó su tiempo, el humano le gustaba pensar que esto haría feliz a Asriel.

Lástima que hace tiempo perdió el paradero de Flowey.

-En fin.

Toriel siguió hablando.-Hoy irás a tener otra cita con Muffet?-Preguntò en un tono maternal, Toriel mientras un brilló aparecía en sus ojos.

Frisk tembló un poco, pero pudo afirmar el echó con un simple movimiento de Cabeza.

Frisk había estado teniendo citas con Muffet últimamente. Desde que sé lo pidió por primera vez hace más de un mes. Los demás amigos cercanos al humano no tardaron en enterarse. Todos teniendo reacciones parecidas de estar sorprendidos como a la vez felices por él, claro que también fue bastante vergonzoso, más cuándo su madre lo descubrió.

Aún recuerda haber escuchado el gritó de euforia de su madre escuchándose desde tres manzanas de la ciudad.... El lado positivo es que aceptaban a Muffet. Teniendo en cuenta lo sobreprotectora que era su madre y el pasado que tenía con la chica araña.

-Ya sabía. Por algo soy tu madre.-Dijo Toriel dejando escapar algunas risitas.

Frisk no sabía porqué, pero sentía que Sans tubo que ver con qué su madre lo supiera lo de la cita de hoy. En primera porqué sé lo comentó ayer cuándo fueron a comprar condimentos para la cena de ese día.

Sí, Frisk estaba considerando dejar de contarle todo a Sans. O pasar tanto tiempo con el esqueleto, estaba teniendo chistes malos pasando por su mente últimamente.

-No te importaría....-Dijo en voz casi baja, Toriel mientras le daba unos golpecitos a la mesa con su meñique.-Llevarle un pedazo de tarta a tu novia?-Preguntò la mujer cabra sonriendo genuinamente.

Frisk no le vio nada malo a esa idea, pero también tubo que corregir a su madre. Muffet no era su novia como tal porque aún no habían echo nada oficial. La amaba y disfrutaba del tiempo con ella, pero no quería ir demasiado rápido y arruinarlo todo, prefería ir naturalmente y esperar el momento indicado a dar el siguiente pasó.

En fin, que luego de hablar un poco más con Toriel, Frisk con una pequeña caja en las manos fue directo al lugar dónde tendría su cita de hoy.

Recordando las opciones que me dieron sus amigos. Alphys y Undyne le sugirieron que la mejor opción era el basurero, Papyrus sé ofreció el mismo a hacer espaguetis para todos en su habitación y Sans le dijo que fuera a un parque dónde había buenas bancas para recostarse.

Frisk tomó la opción de Sans como la más normal y la más coherente. Muffet no parecía alguien que le gustara los basureros en primer lugar y lo de Papyrus no creo que hace falta decir el porque no era una opción factible.

Frisk ya estaba llegando al parque. Había quedado con Muffet en verse a las 14:20 en el parque. Él siempre llegaba puntual y Muffet dependía del trabajó sí llegaba algo temprano o algo tarde.

Frisk entendía lo difícil que era manejar un negocio y mantener a un montón de arañas, así qué no le importaba, ni Muffet debía disculparse con él por haber llegado tardé, que alfin de cuentas lo importante era pasar tiempo juntos. Así pensaba el humano.