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"A... ah... estás..." Sus mejillas se encienden de color carmesí mientras echa un vistazo a su alrededor... no es que pueda, con la forma en que sus ojos parecen estar siempre aferrados a ti. Cuando tus labios encuentran su piel y tus dedos a sus caderas, sólo puede esperar y rezar para que nadie oiga el gemido que se le escapa, y los varios más que vienen después. "Eres muy hermoso, ¿Sabes, Sebek?" Dice con una sonrisa. "Sé que es extraño viniendo de una chica, pero eres la persona más hermosa que he conocido". Para enfatizar, le tiras en un fuerte abrazo, envolviendo todo lo que puedes su figura más grande como para decir " Te quiero", y él te lo devuelve con un gemido, pareciendo absolutamente impotente por tu afecto."Yo también te quiero". Una simple pero sincera declaración de su amor es lo que piensas de ella, pero bajo la superficie se esconde un significado más profundo y retorcido.Si supieras lo profunda que es la declaración.
