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✿ 𝐃𝐑𝐀𝐊𝐄𝐍
EL BORRACHO BROMEADOR: en raras ocasiones se suelta y simplemente se relaja, y su misión es ponerte nerviosa. piensa que está siendo increíblemente divertido, interrumpe tus frases para besarte, te hace cumplidos de la nada, hace comentarios sugerentes, te guiña el ojo después de decir algo coqueto, simplemente es intolerable. pero aun lo amas <3
—nena, nena, ¿adivina qué?— draken sonríe, besando tu mejilla.
suspirando, intentas luchar con su figura de seis pies en el asiento del pasajero, pero no lo detiene.
—¿qué? ¿qué pasa, ken?
—eres muy sexy— dice con una amplia sonrisa, las manos deambulando por tu cintura. suspirando, colocas un mechón de cabello detrás de su oreja, poniendo los ojos en blanco.
—gracias, ken. ahora, por favor, entra..
—muy caliente sin ropa también. quítatelos— te guiña un ojo mientras te interrumpe, haciéndote gemir cuando la gente que pasa se ríe. empujándolo, lo obligas a entrar en el coche.
—lo juro por dios, ken. déjalo ya, primera advertencia.
✿ 𝐇𝐀𝐍𝐌𝐀
EL BORRACHO POSESIVO: su objetivo en la vida es que todos y su madre sepan que eres suya, trata de besarse contigo frente a todos, te agarra el trasero, te roba la bebida, te toca la mejilla, pide irse a casa para poder hacerlo. entre otras cosas, pero solo lo arrastras a casa para salvar tu dignidad.
—sí, hago qué grite mi nombre todas las noches— sonríe hanma, señalándote con el pulgar y haciendo que la pareja a tu lado se mueva torpemente mientras le dan sonrisas tensas.
—el no hace tal cosa— tratas de reírte
—oh, lo hago— grita por encima de tu hombro mientras lo empujas hacia la puerta— es por eso que estoy siendo arrastrado ahora mism-
—que tengas un buen resto de tu noche— interrumpes— shuji, cállate— adviertes.
sonriendo, hanma se inclina y te besa, tratando de profundizarlo mientras te alejas.
—bebé, vamos— murmura— solo intento conseguir algo.
✿ 𝐂𝐇𝐈𝐅𝐔𝐘𝐔
EL BORRACHO NERVIOSO: se sonroja cuando le agarras la mano, tartamudea cuando le dices bebé, prácticamente se desmaya cuando le apartas el pelo de la frente sudorosa. se olvida de que estás saliendo al final de la noche, se sorprende hasta la médula cuando lo llamas cariño.
