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Hola! Quería aclarar un par de cosas antes de que continuéis leyendo el final de la historia. 

Hace unas semanas me llegó un mensaje privado de una lectora de FTP2, cosa que me sorprendió porque nadie suele contactarme por buzón. Pues bien, esta persona me explicaba desde un tono muy altanero que esta historia le parecía una aberración —en pocas y resumidas palabras— porque Jimin y Yoongi se llevaban demasiados años y que, además, Jimin estaba con él simplemente porque tenía daddy issues. 

No sé si a algunas personas en esta plataforma las han educado dos monos de feria en lugar de sus padres, pero lo parece. Me da igual si mi historia os parece una puta mierda de caballo: NO LA LEÁIS. Pero no vengáis a decirme en tono condescendiente que me faltan luces por escribir ficción, por hacer a Yoongi mayor o por hablar de abandono familiar en una historia que, ni siquiera, está basada en hechos reales. 

Lo mínimo que le debéis a una autora es respeto, de la misma manera en la que yo siempre he respetado a todos ellos que no disfrutan de lo que hago. ¿Eso significa que tengo que dejar de escribir? Lo siento muchísimo, pero no. Voy a seguir escribiendo lo que me salga del higo.

Así que, a la próxima, ahorraos vuestros comentarios destructivos, o al menos dejadlos en un comentario público para que el resto de lectores vean lo intrusivas y maleducadas que podéis llegar a ser. 

Dicho esto, pido perdón a las lectoras que habíais venido a leer un esperado capítulo final y os habéis encontrado con mi mal humor, pero era necesario que lo contara. Ahora sí, os dejo con mis dos bebés siendo un desastre y nos leemos en el epílogo <3

 Ahora sí, os dejo con mis dos bebés siendo un desastre y nos leemos en el epílogo <3

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Yoongi se mordió las uñas. Era un viejo hábito que creía superado, pero la ansiedad lo estaba carcomiendo. Se había dedicado durante más de media hora a observar con nerviosismo como la gente iba y venía de la cafetería en la que se encontrada, reflexionando sobre el montón de historias que le rodeaban, muchas de ellas más complicadas que las suyas, siendo totalmente ajeno.

Suponía que para las personas que lo miraban a él, era igual. Estamos acostumbrados a dar por hecho que somos el personaje principal, cuando realmente estamos rodeados de protagonistas de miles de novelas independientes.

La conclusión era que se sentía insignificante. Sabía que lo que estaba a punto de pasar cambiaría su vida para siempre. No, mejor dicho, el día en que conoció a Jimin había cambiado su vida para siempre. Era como un punto de no retorno en el tiempo, y había afectado a la vida de Sohee de igual manera.

Todo era un desastre. Su mujer lo había estado ignorando durante dos semanas enteras, de la misma manera en la que él había estado ignorando a Jimin. Su rubio alumno lo había intentado llamar, le había pedido que se vieran para hablar las cosas y armar una estrategia. Él quería que se comportaran como... una pareja. Pero la sola palabra lo asustaba, el compromiso que suponía le daba vértigo, y no porque no estuviera acostumbrado a estar comprometido, sino porque Jimin era un caso aparte.

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