Mi Amor Ha Muerto (En Pausa)

Capítulo 0. Prologo

Una alta luz vehicular que se puede ver a través de la fuerte lluvia.

Un automóvil de color blanco, elegante, que toma una curva y se adentra a una carretera con poca iluminación. El hombre que estaba al volante, golpeando con sus dedos a un ritmo irregular el manubrio, mostrando un estado un poco nervioso, de forma inconsciente mueve una de sus manos para sacar algo de su bolsillo. La punta de su dedo sintió la envoltura de plástico duro, no era eso lo que buscaba. La frente del hombre que no podía encontrar lo que estaba buscando se arrugó por la ligera molestia.

Su organismo necesitaba nicotina. Tenía ansiedad y sentía una sed implacable. Se lamió los labios y decidió pisar el acelerador con fuerza, el motor del auto ronco por la acelerada de velocidad. En ese momento, por su cabeza paso el recuerdo de alguien. 'Es muy lindo verlo quejarse por el olor del cigarro'. El hombre sonrió con dulzura y al mismo tiempo de mala gana y mordiéndose el labio para reprimir las ganas de fumarse un cigarro. Debido a la mordida, el sabor de la sangre empapo su paladar.

Antes de que pudiera seguir lastimándose el labio, saco un caramelo de la cajuela del carro y se lo metió a la boca. Era un caramelo inusual, aunque la compañía que lo distribuía era estadounidense, el caramelo era elaborado en Corea. Era un caramelo de limón con un relleno agridulce.

El caramelo, que era blanco en el exterior, fue envuelto en su lengua rojiza para que se fundiera más rápido. El hombre tenía la costumbre de no morder el caramelo, prefería esperar a que se derritiera y que el relleno se esparciera por su boca. Cierta persona, una vez le dijo que esa era una forma muy paciente de comer caramelos. Para él, entre algo más te gusta, más lo quieres disfrutar lentamente.

El caramelo rodó de lado a lado dentro de su boca y encendió la radio. En la emisora estaba sonando el BSO* de una película romántica que fue ambientada en Los Ángeles. Después de escucharla unos segundos, el hombre recordó que esa película se llamaba “La La Land”. La película retrataba una historia de un amor a primera vista, una vida de sueños inalcanzables… personalmente, no me gusto su final. Fue un final muy ambiguo, no sabría decir si fue un final feliz o triste.

N/T: BSO: lo que significan estas siglas es Banda Sonora Original de una película o serie.

El hombre que estaba muy concentrado con los botones de la radio cambiando la emisora. Una luz cegadora fue reflejada en su retrovisor, no pudo procesar nada y mucho menos cuando sintió el impacto en la parte trasera del auto. No había salida de allí.

#Sonido de Impacto#

El sonido del choque lo dejo sordo por un momento. El impacto fue tan fuerte que pudo ver el cielo oscuro.

Antes de perder el conocimiento, momentáneamente, vio como un gran rayo resplandeció y resonó con mucha fuerza.

-

Abrí mis ojos por el sonido de una sirena, parpadeé varias veces para dispersar la visión borrosa. El sonido de la sirena era bastante estruendoso, y más cuando se fusionaba con la caída de la lluvia. Mis oídos se sentían hartos de escuchar aquello. El hombre hizo el intento de pararse, pero se sentía muy pesado. Miro hacia abajo, y vio que la mitad de su cuerpo yacía aplastado por el capo de un camión. Su cuerpo, y sus intestinos en el asfalto, era una escena tan ficticia que podía encajar perfectamente en una película de terror. Era incómodo, por la sangre empezó a salir por su boca.

' ¡Vaya forma de morir!´

El hombre, cada vez más, sentía la llegada de la muerte. Y allí se dio cuenta de que no existía tal cosa como, “La luz al final del túnel” como lo decían algunos.

Lo único que pudo ver pasar por su cabeza, eran pedazos de fragmentos de su infancia y sobre todo de las cosas que me arrepentía por no haber logrado en mi corta juventud. 'Si hubiera sabido que iba a morir de una forma tan inútil…´. El hombre corto sus pensamientos y dio una risa burlesca de su estúpido yo.

Ya era tarde, muy tarde para arrepentirse. Su cuerpo perdía cada vez más fuerza, y lo único que podía hacer era rodar con su lengua el caramelo que aún tenía en su boca.

El hombre se decidió por primera y última vez en su vida, morder el caramelo en su boca. El relleno agridulce, carameloso y líquido se esparció en su boca, mezclándose con su espesa sangre.

-“JA… JA… JA… JA… JA”

La risa entrecortada por el ahogo de la sangre, era realmente incómoda, pero era lo único que podía emitir de su boca. De manera natural, el bullicio de su alrededor sé fue apagando junto con la luz de sus ojos; su corazón, que fue lo último que dejo de funcionar, se detuvo en algún punto.

'Ahora, todo es silencio absoluto´.

Y allí, se terminó su vida.

Traductor: GinebraConTequila
Corrector: GinebraConTequila

TRADUCCIÓN SIN FINES DE LUCRO. NO HAGAS PDF.