CAPITULO DÉCIMO SÉPTIMO

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Estaba el clima cálido en la casa de verano de los Kim, pero Min Hee estaba cubierta con un suéter y cuello de tortuga, dijo que sentía que se iba a resfriar por eso tampoco tenía mucha hambre y de la había pasado leyendo en la terraza que daba hacia el jardín.

—¿Segura no quieres comer nada?

Tae se preocupada demasiado por el estado en que se veía Minnie.

—Estoy bien Tae, verás que mañana me repondre —se levanta de la silla —deja me doy una ducha y vemos una película ¿vale?

—Esta bien.

Minnie dio dos pasos y sintió que las piernas le fallaron, estaba débil y cansada, pero antes de tocar el suelo, Taehyung la atrapó, provocando un gran dolor en su abdomen, haciendo que la pelirroja se quejara en demasia.

—Minnie, ¿Qué pasa?

Su suéter se levanta un poco  dejando ver unas marcas violaceas  en lo blanco de su piel, Tae levanta en su totalidad el suéter mirando con horror las grandes manchas de golpes.

—Es suficiente Min Hee —Tae la carga hasta la cama — se que tu padre hace esto, lo he visto otras veces en el internado, ¿Por qué no lo denuncias?

—Es que me lo he ganado Tae —con el puede llorar lo sabe —no lo obedecí y eso me convierte en mala hija, es todo mi culpa.

—¡ÉL NO PUEDE HACERTE ESTO!

El padre de Tae escucho los gritos y entro a la habitación, mirando el cuerpo golpeado de la joven.

—¿Tae que está sucediendo?

—Kim Seokjin, su padre le hizo eso, y no es la primera vez.

—Lo mataré.

Minnie y Taehyung no sé esperaban la respuesta de Namjoon, este salió enfurecido de la casa, buscando a quien había dañado a su dulce y adorada amante.

—Debo detenerlo.

Minnie  se coloca rápido una camisa y sale junto que Tae a buscar al moreno, las cosas no terminarían bien...

Minnie  se coloca rápido una camisa y sale junto que Tae a buscar al moreno, las cosas no terminarían bien

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