11 Pensar en ella, me emociona.

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Toco mis labios con mis dedos, aun sintiendo la sensación de sus dulces labios sobre los míos.

Aun no se como me atreví a besarla. Muchas veces la pille mirándome, pero jamás imagine que ella pudiera gustar de mí. Mucho tiempo he reprimido mi deseo por el mismo sexo, para evitar cualquier escandalo que pueda afectar la imagen de la empresa. En lo personal, no me importaría que la gente me señale, ya que mi familia y mis amigos íntimos saben lo de mi preferencia sexual.

Hoy saldré con ella. Aun no somos nada, pero se que con el tiempo iremos avanzando a algo mas formar. Me gusta. Me gusta mucho y estoy dispuesta a enfrentarme al mundo por ella, pero ella tiene miedo, y no se que hacer para que ella esté segura de sí, y no le tema al que dirán. Bueno, yo estoy en el mismo dilema por la empresa, pero, el mismo Luis me dice que a el no le importa lo que la gente pueda decir de mi o la empresa. Dice que siempre me apoyara en mis decisiones. Amo a ese cabrón, aunque me enloquezca, lo quiero. Es mi mejor amigo y mi familia más cercana. Siempre me apoya y cuando mas lo necesito, siempre está para mí. En ocasiones me siento depresiva, y aunque no lo demuestre, siempre ¡se da cuenta, se aparece en mi casa con comida chatarra, con películas, y con una gran sonrisa y un abrazo, salva mi día.

–Necesito un gran favor – me dice el cabrón, lo miro seria, ya me imagino lo que quiere.

–Luis ella no es para una noche, no voy a permitir que le hagas lo mismo que a las zorras con las que te acuestas – digo en tono de enojo.

–Solo quiero cenar con ella – me dice con cara de borrego atropellado, me tiene harta esta situación.  Esa sonrisa de no voy a hacer nada.  Me quilla (me molesta, me jode, me enoja)

–El echo de que seamos buenos amigos no quiere dejar dicho que apoyare todos tus actos pocos dignos – digo mientras me pongo de pie y lo enfrento – carolina no es una más de las putas que usas para follar

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–El echo de que seamos buenos amigos no quiere dejar dicho que apoyare todos tus actos pocos dignos – digo mientras me pongo de pie y lo enfrento – carolina no es una más de las putas que usas para follar. Esa chica a llegado a ganarse mi simpatía. No permitiré que le hagas daño.

–Dame el beneficio de la duda, solo la voy a invitar a cenar – dice con simpleza.

–¿A cenar y luego qué? – lo reto con la mirada. Si piensa que le creeré el hecho de que solo la invita para cenar, está muy equivocado – se muy bien como opera tu modus operandi.

–¿Sí?, y según tú, ¿Cuál es? – me reta mientras se cruza de brazos.

–Primero la invitaras a cenar, emplearas coqueteos he indirectas durante toda la cena, luego viene la propuesta indecente – grito enojada – eres un marrano. Después de todo el monólogo la llevas rumbo al matadero, que es cualquier cuarto de hotel – él estaba muy sorprendido.

–¿Me espías? - pregunta achinando los ojos.

–Hay por Dios – digo exasperada – que mujer de esta ciudad no sabe como actúas.

–De verdad, yo solo la invitaré a cenar – se acerca a mi y me da una mirada suplicante - te prometo que solo será cenar.

–Espero no arrepentirme de esto – que quieres que haga? – Luis esboza una gran sonrisa, se acerca a mi y me abraza.

Mi Sexi ModeloDonde viven las historias. Descúbrelo ahora