I want to have you. | Steddie.

- 2. -

Apesar de lo tanto que pensaba en que se había mandado una cagada al aceptar ir, se había terminado vistiendo un toque menos de entre casa y había peinado su descontrolado cabello.

Eddie tenía puesto un jean negro, una camisa de la mascota de Iron Maiden en la portada de Killers, quien encima se llamaba igual que él, su típica campera de cuero y su chaleco de siempre por encima. En sus pies, llevaba unas medias ridículamente infantiles, tapadas por unas altas botas negras con tachas.

Como siempre, llevaba un pañuelo negro con calaveras en su bolsillo izquierdo del pantalón, aunque quizás no muchos conozcan su significado. Y también como solía hacerlo, tenía miles anillos adornando sus grandes y esqueléticas manos, no olvidemos las muñequeras en sus brazos y cadenas en su jean.

Munson jamás había sido invitado a una de las famosas fiestas que se hacían en la casa de Steve Harrington, pero aún así sabía dónde se encontraba aquel lugar. Era un lugar típico y conocido por todo la escuela de Hawkins.

Cuando apenas faltaban 20 minutos para que sean las 9pm, salió finalmente de su tráiler, maldiciendo por lo bajo al darse cuenta que debía ir caminando.

- "No van a robarme, secuestrarme o asesinarme en la calle. Después de todo, vivo en Hawkins."- Murmuró con tranquilidad, encogiéndose de hombros a mitad de camino.

No iba a negar lo genial que se veía con su campera de cuero y su chaleco de jean lleno de parches de bandas, pero sentía su cuerpo temblar del frío. Y tampoco hablamos de sus jeans llenos de roturas, Munson jamás pensó la cantidad de viento que podía pasar por allí.

- "Voy a morir de hipotermia por las calles de un pueblo deprimente."- Pensaba en voz alta, viendo la casa de Harrington a un par de metros.- "O en la puerta de la casa de un idiota que probablemente me odie y sienta asco de mí..."- Soltó con diversión, antes de reír y apurar su paso, dando saltos torpes e idiotas para, según él, entrar en calor.

Cuando llegó a la gran casa del tan famoso y sexy Steve, obvio que lo último solo dicho por chicas tontas de la secundaria, tocó la puerta con sus nudillos, rezando porque ya hayan llegado todos.

Steve caminó hacía la puerta, con su perfecto y espantosamente ridículo peinado de siempre.— "¿Quién es?"— Preguntó apoyando una de sus manos en el pomo de la puerta, aún sin abrirla.

— "Eddie."— Respondió algo nervioso, temiendo de que el castaño no sepa que él venía y lo muela a golpes por ser un raro que se aparece en su puerta.— "Eddie maldito Munson."— Concluyó soltando una leve carcajada, peinando rápidamente sus descontrolados y largos rulos.

La puerta fue abierta luego de unos segundos, Munson se encontró con el propietario de la casa viéndolo confundido.

— "Dustin, ¿Invitaste a tu amigo adulto supuestamente tan genial como yo?"— Dijo sin vergüenza alguna, dirigiendo su vista hacía Henderson.

— "¡Sí! Olvidé mencionarlo, lo siento."— Dustin rió, antes de ir rápidamente hacia Eddie y arrastrarlo dentro de la casa, tomándolo de la mano.

— "Oh, sí, genial... Simplemente mete a tu amigo raro a mí casa sin siquiera preguntarme antes..."— Dijo Steve claramente de manera irónica, alzando sus brazos y mirando a Dustin como su fuese a estrangularlo con los ojos.— "Sin ofender, Munson."— Agregó.

— "Eso definitivamente sonó como si buscarás ofenderme, Harrington."— Contestó por lo bajo, abriendo sus ojos y jugando con uno de sus mechones de pelo.

Steve ignoró totalmente el comentario de Eddie, tampoco quería pelear con él, pero no podía negar que sentía que lo había remplazado en su vínculo con Dustin, y estaba celoso por eso.

— "¿Pueden dejar de pelear? Creo que ya es hora de ir saliendo."— Interrumpió Robin, quien estaba sentada al lado de Nancy en el sillón de la sala de estar, soltando suspiro pesado mientras acomodaba su cabello.

— "Robin tiene razón."— Comentó rápidamente Dustin, sin ganas de ver a sus amigos discutir.— "¿Falta alguien?"—

— "Henderson, Jane, Wheeler, Mayfield, Byers... ¿Viene Lucas?"— Steve fue nombrando a los niños, hasta que se dió cuenta de quién era el que faltaba.

— "Él no va a venir."— Respondió la chica pelirroja, bajándose sus auriculares y hablando en un tono totalmente rígido.

Los demás adolescentes hablaban y reían entre ellos, en especial Jane y Mike, quienes estaban casi que pegados al lado de Will.

— "Ok, entiendo."— Dijo Harrington ante la tan cortante respuesta, riendo con ciertos nervios. Max le aterraba a veces. — "Pueden ir saliendo y entrando al auto."— Abrió la puerta de la casa, antes de ir y tomar los bolsos de los chicos para llevarlos.— "Mayores, ayúdenme a subir las cosas."— Dió Steve como órden, dirigiendo está hacía Nance, Robin y Eddie.