Finalmente, después de una semana, ya se encontraba desayunando a las 7:00, obviamente solo ya que su madre entraba a esa hora y el entraba a las 7:30. No tenía ánimos de ir al colegio y ver como la gente se le queda mirando. Pero no tenía de otra, su mamá le dijo que tenía que ir, Seonghwa había dicho que si no iba al colegio iría a Seúl para jalarle las orejas, y claro que había más pero era mejor ahorrarse el comentario de Yeosang, y en especial el de Yunho.
Al terminar se lavó los dientes y salió de su casa con sus cosas, ya se había aprendido el camino del colegio a su casa, solamente.
Caminaba mientras escuchaba música, su mamá le mataría si supiera que no le aprestaba atención a su alrededor por andar con los auriculares, pero si no llevaba sus auriculares se sentiría incómodo.
Cuando cruzó la calle tuvo que ir por un pequeño callejón que en verdad no le agradaba mucho pero era la única forma de ir por el momento porque estaban haciendo un edificio nuevo y para evitar accidentes cerraron el pase. Habían solo dos estudiantes en el lugar caminando, pero no eran de su colegio porque llevaban otro uniforme, Hongjoong decidió guardar sus audífonos y su celular, ya que en este tipo de lugares debería tener cuidado.
Cruzó aquel callejón con éxito y siguió con su camino. Minutos después se encontraba ya al frente de su colegio, sus manos estaban aferradas a su mochila nuevamente, había dos inspectores inspectores en el portón vigilando, entró dando los buenos días a uno que lo miro y este cabeceó, esperaba algo peor pero eso fue bueno.
Al entrar se le olvidó un pequeño -importante- detalle, preguntarle a su madre en que salón había quedado. Quería darse una cachetada por no haberle preguntado antes de que se fuera, sin saber que hacer decidió caminar a lo que era la oficina del director para ver si con suerte le ayudaba.
– Hongjoong! – este se detuvo y buscó de donde provenía el llamado, su mirada se enfocó en los chicos que le hablaron aquel día que su madre lo inscribió.
– H-Hola.... San... Wooyoung? – rogaba que no se haya confundido de nombre, aunque el primero era fácil de recordar.
– Sip – sonrió – ya sabes en que salón estás? – este negó tímidamente – Y eso?
– Olvidé preguntarle a mi madre...
– Podemos ir con el director para preguntarle – sugirió Wooyoung amablemente.
– Eso iba a hacer... pero me da pena...– bajó la mirada.
– Te acompañamos, ven – agarró la mano de mayor y de su novio y los jaló a pasos rápido hacia la oficina del director sin importarle las miradas de los demás.
Wooyoung se apresuró y toco la puerta dos veces, al escuchar un "adelante" los chicos ingresaron a la oficina y vieron a dos chicos sentados sin dirigir la mirada. Hongjoong se sorprendió al ver al chico que había invadido sus pensamientos por estos días, su sorpresa fue más grande al ver que tenía su labio roto y una pequeño moretón en el ojo.
– Buenos días chicos, en que les puedo ayudar? – dijo serio el director haciendo que San se pusiera detrás de Wooyoung y Hongjoong.
– Y-Yo olvidé preguntarle a mi madre en que salón había quedado... – dijo jugando con sus manos evitando mirar a ambos chicos, el director suspiró y busco unos papeles que tenía en su escritorio y en unos segundos lo volvió a mirar.
– 12 D – respondió y este asintió.
– G-Gracias y lo sentimos por la interrupción
– No pasa nada, pueden retirarse – dijo amablemente y los tres salieron después de hacer una reverencia, Wooyoung fue el último en salir y fue quien cerró la puerta.
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¿Shy Cat? Minjoong [PAUSADA]
Non-FictionHongjoong es un hibrído tímido y reservado, se mudó con su madre a Seúl, gracias a su padre, quien lo detestaba por ser un hibrído, haciendo que se separara de su hermana mayor, su mayor consuelo y sus únicos amigos. Él era conciente que al llegar a...