No Quiero ser Amada ✿ 1-179 ✿

Capitulo 167

Después de que la Reina Madre perdiera su posición, poder y autoridad, la mayoría le dio la espalda, ignorando su nombre y existencia. Era un hecho natural cuando uno pensaba en ello. Después de todo, ¿quién le prestaría atención a una realeza que había perdido todos sus poderes?

Sin embargo, aquí estaba Rihannan, un caso atípico, quien la cuidó después de regresar de Arundell. No era alguien que ignoraría fácilmente el cuidado que alguien le brindaba.

Cuando alguien se encuentra en una situación difícil, solo verá el verdadero valor de una persona que alguna vez tuvo una relación con la otra parte. La Sra. Cessley sabía que Rihannan era el tipo de persona que veía la bondad en los demás.

“Estoy seguro de que la Reina Madre estaría feliz de recibir un regalo tuyo, Mi Reina. ¿Qué tal si haces uno para Su Majestad también después de que termines de coserlo? A él también le encantará. La Sra. Cessley sonrió, haciendo una pregunta disimuladamente en el calor del momento.

Rihannan sonrió torpemente. "Me pregunto. No creo que a los hombres les gusten regalos como estos en particular…”

Ella también se iría una vez que termine su contrato. ¿Había necesidad de molestarlo con un regalo?

La Sra. Cessley miró a Rihannan por un momento. Sus labios se separaron después de que un segundo ataque de pensamiento repentinamente apareció en su mente.

“En realidad, hubo algo que Basil me dijo en el pasado si lo recuerdo bien. Dijo que Su Majestad tiene algo dentro del cajón de su mesa de trabajo en el estudio. A veces lo sacaba y lo miraba solemnemente cuando estaba solo. Basil cree que el objeto está relacionado contigo, mi reina. ¿Alguna vez le has dado algún tipo de regalo en el pasado?"

“No, no le he dado uno que se me ocurra…”

"…¿Es eso así? Entonces me pregunto qué podría ser”, la Sra. Cessley la inclinó confundida, cambiando inmediatamente el tema a partir de entonces, “Pero no importa. De todos modos, ¿sabe que Su Majestad ha estado sufriendo recientemente?"

Rihannan miró a la Sra. Cessley, con los ojos muy abiertos y sorprendidos.

“¿Se lastimó? ¿Cómo? ¿Qué tipo de dolor tiene?"

Al ver la expresión de preocupación de Rihannan, la Sra. Cessley sonrió astutamente.

“No es nada grave, sino un mal caso de resfriado. El gran patán Basil estaba muy preocupado porque Su Majestad siguió trabajando y trabajando hasta que se desmayó. Terminó resfriándose”.

Rihannan rápidamente borró la mirada de sorpresa en su rostro y bajó la mirada.

“…Estoy segura de que sabe bien cómo cuidar adecuadamente su resfriado”, dijo Rihannan.

"Por supuesto. Lo haría”, la Sra. Cessley agitó su abanico y sonrió.

Rihannan había perdido esta batalla de ingenio. La Sra. Cessley podía darse cuenta de lo que estaba pensando incluso después de fingir indiferencia.

Esa noche, se despertó en medio de su sueño. Rihannan vio una luz tenue que se filtraba por el hueco de la puerta que conducía a la sala de estudio.

Miró el reloj. Eran las 3 de la mañana. Rihannan se mordió el labio, preocupada de que todavía estuviera trabajando a esta hora.

Rihannan se bajó de la cama y se puso un chal encima del pijama. Apoyó la oreja contra la puerta, pero fue inútil. No podía oír ningún sonido.

Abriendo la puerta con cuidado para mirar adentro, vio a Igor durmiendo con el rostro recostado sobre la mesa sostenido por sus brazos. A su alrededor había numerosos documentos esparcidos desordenadamente.

En estos días, Basil no necesitaba andar buscándolo para firmar documentos en los que había que trabajar. Igor había estado ocupado diciéndole que trajera trabajo incluso cuando no había ninguno.

Rihannan se acercó a él en silencio. Su rostro que era visible debajo de su cabello se veía demacrado y desgastado.

Las palabras de la Sra. Cessley sobre Igor en el dolor eran ciertas.

Rihannan, preocupada, puso el dorso de su mano en su mejilla. Al notar la alta temperatura que irradiaba su piel, las preocupaciones de Rihannan aumentaron.

Igor era una persona sensible al tacto que se despertaba rápidamente con el toque de Rihannan, pero dormía profundamente.

No se sentía bien al ver su debilidad, más de lo habitual. Sus recuerdos felices durante el último mes volvieron a su mente y todo lo que quería era abrazarlo...

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Fin capítulo 167