El Gran Cambio De Mi Vida (Pablizza)

vestuario (30)

Marizza

Los días habían seguido pasando aunque estuvieron llenos de trabajo, hoy en la noche íbamos a ir a un concierto al aire libre, no era algo grande, era un evento privado, pero la paga era muy buena

En cuanto a la relación con los chicos había mejorado creo yo, me dolió mucho lo que había pasado y los había extrañado mucho, no podía decir que era lo mismo, pero había un avance, igual Benito ya me dijo que un día vamos a tener que hablar sobre lo que paso por el bien de la banda, solo que espero que ese día este lejos

-bien chicos, salió muy bien - nos dice Bentio al terminar el ensayo

La verdad es que no era la gran cosa, no se comparaba con el show que íbamos a hacer en el gran Rex y con lo que teníamos planeado para la gira, aunque tampoco era que era simple, había baile y había que cuidar mucho la entonación, pero no teníamos que hacer bailes en parejas ni trucos como vamos a hacer en la gira, lo cual hace que sea mucho más fácil, y la coreo no tiene un nivel de complejidad tan alto pero si tiene su nivel de dificultad

- chicos después van a tener que pasar por el vestuario para que se midan la ropa para el show - nos dice Benito- si pueden vayan ahora para que puedan hacerles los ajustes que necesiten, igual vamos a hacer un ensayo con el vestuario allá

Los cuatro asentimos y juntamos nuestras cosas

- no lo puedo creer - digo camino al vestuario y me largo a reír

-¿que? - pregunta confuso Manuel

-vamos a volver a tocar para una fiesta de conchetos -y me largo a reír, los otros tres quedan medio shockeados al principio pero luego se me unen a las risas

- ¿cómo andan chicos? -nos pregunta Camila una de las modistas- pero que chicos responsables, no pensé que vendrían tan pronto - nos dice con una sonrisa. La verdad que Camila es un amor - el vestuario es como quizo el encargado del evento a sí que si está feo o no les gusta vayan a reclamarle a él -nos dice de una forma graciosas- Pablo, Manuel - dice dándole los trajes guardados - Mia y Marizza - dice- pruébense tranqui que yo ya vuelvo - nos dice con una sonrisa amable

Yo le sonrió en respuesta y sale del lugar

Abro el coso dónde lo trajes estaban guardados y sacó el vestuario

-estan en pedo si piensan que voy a bailar a sí - digo yo mirándome en el espejo una vez probado

Pablo y Manuel me miran de arriba abajo con la boca abierta

-no está tan mal... - trata de ser positivo Manuel aunque ni él se lo creía

-¡estoy prácticamente en bolas! - me quejó viéndome

El vestuario era una pollera que me quedaba un centímetro debajo del culo, con un top que dejaba descubierto todo mi abdomen con un GRAN escote, literalmente el top eran dos "triángulos unidos por un hilo que atravesaba mi cabeza, más simple : se me veían casi todas las tetas

-tampoco es TAN grave - digo tratando de convencerme mientras me miro al espejo- está bien - y era cierto, ahora que tenia más autoestima y confianza me gustaba como en quedaba, si bien dejaba poco a la imaginación, no me desagradaba la idea de usarlo

-¿estas loca Marizza? Se te ve TODO - dice Pablo pasándose las manos por el pelo frustrado

-¿y? - le preguntó

-no quiero que piensen que somos un porno show - me dice él

- no te preocupes pues Pablito que a si tenga una bolsa de papas, una túnica de monja o una bikini, voy a hacer mi trabajo genial y la voy a dar toda en el escenario, ya si la gente me ve como prostituta allá ellos, no voy a dejar se hacer mi trabajo y lo que me apasiona por lo que los demás dicen - digo simplemente

-¿y chicos? - pregunta Camila entrando devuelta al vestuario- ¿que tal?

- bien - le respondo yo - en siete bien, me va bien

- lo mismo digo - dice Mia apareciendo una vez que se terminó de cambiar

- me alegro chicas, igual a ver - dice viendo mi traje y el de Mia - ¡uy! Menos mal que nos fijamos, al tuyo Mari le hace falta la parte de abajo es como un short - me dice ella

-¿osea que se me va a ver menos? - pregunto no muy segura yo

-no, no, es como un clip que va a ir ahí abajo - dice señalando la pollera - por las dudas

- a regio

-igual Camila ¿no te parece que está muy corto? - pregunta Pablo ¿y a este que le pasa?

Camila levanta las manos en seña de no saber - yo los hice según los que el dueño del evento que es quién nos contestó quería, si quieren les muestro

-no, está bien Camila, pero gracias igual. Los trajes te salieron hermosos - le digo yo amablemente con una sonrisa a lo que ella responde de la misma forma

- bien,ya tendríamos que irnos pero ¿cómo hacemos? Es decir, ¿tenemos que volver más tarde para ponernos los vestuarios, nos los llevamos, o como?

- vengarse a las 19.00, aquí se cambian y los arreglamos y de aquí nos vamos a la fiesta

Los cuatro asentimos y ente agradecimientos nos despedimos

Pablo

-podrías ser un poco más disimulado - me dice Manuel

-¿a qué te referís? - le pregunto yo

- a Marizza idiota, es obvio que aún sentis algo por ella

-¿que decis?

-vamos Pablo, como la mirabas hoy, y como se te fueron los ojos cuando la viste con ese vestuario... además "¿no te parece que está muy corto?" - Manuela se largó a reír - podrías al menso disimular un poco los celos - dice muy divertido

-estás diciendo cualquier - pero la verdad es que debo admitir que a Marizza el traje se le veía espectacular, su cuerpo había cambiado desde la última vez que la había visto (no quiere decir que antes su cuerpo estaba mal ni nada) solo que ahora estaba distinto, ella estaba más desarrollada, pero además había algo más, había un seguridad que irrqdiaba que hacia imposible sacar la vista de ella y eso me jodia un poco

-¿me va a negar que se veía hermosa y sexy en ese traje? ¿Y que no te moris de celos al pensar que muchos hombres la van a ver a sí, y que eso va a despertar miles de reacciones en ellos? - me pregunta

Mi mandíbula se tenso ante sus palabras

-¿ves? ¡estas celoso!

-¡Manuel basta! No tengo derecho a estar celoso, ella y yo ya no somos nada -auch el decir eso en vos alta duele pro alguna extraña razón - además yo estoy con Emiliy

-y ella posiblemente este con alguien... - dice Manuel aunque más para él que para mí

-¿qué? - le pregunto

- nada, nada - dice

Y la verdad es que durante miles de noches había tenido esa duda ¿habrá otro? Pero cuando llego, no sé, no creo haberme puesto a analizar realmente esa posibilidad...