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La jornada comenzó común y corriente para Goku, hasta que llegó la hora de irse a los clubs. Todos se habían ido, excepto Goten, quien le estaba esperando.

Mientras guardaba todo, noto algo inusual en su mochila.

Una carta.

Oh, ¿Más admiradores secretos? —

Ah, ¿Qué importa? Luego la leo. —la guardo en su bolso y siguió como siempre su día.

Al llegar a casa, y desempacar sus cosas, volvió a toparse con la carta. La apartó, hasta que llegó la hora de dormir. Era el mejor momento para leerla y luego guardarla o botarla, como siempre hacia.

Quedó algo impactado con quién le hizo la carta.

"Hola, Son Goku, te escribe Zamas, y sus dos hermanos, Black y Zamasu. Te preguntarás, ¿Por qué recibes una carta por parte de nosotros? Porque queremos confesarte algo. Son Goku, eres una persona que movió nuestro mundo cuando te conocimos, nos cautivaste desde que te vimos por primera vez. Sabemos que nuestros comportamientos no fueron los más adecuados para ti, puesto que fue algo de imprevisto para ti, más sin embargo, quiero que sepas que nos gustaría que nos entendieras; nosotros no sabemos cómo expresar nuestro amor o atracción correctamente. Tal vez no nos creas por todo lo que la gente dice, pero estamos siendo sinceros. Black puede cambiar su reputación por ti, Zamas puede darte más atención, y Zamasu dejaría de ser tan esquivó contigo, únicamente por ti, Son Goku. Eres nuestro todo.
¿Podrías enseñarnos a amarte como quieres?

Zamas Sama.
Black Sama.
Zamasu-sama."

Quedó más que impactado al terminar de leerla. Algo en su interior saltaba de emoción.

Mientras un lado estaba feliz, el otro estaba sospechando.

¿Y si lo dice de broma? ¿Y si planean engañarme? ¿Y si me mintieron?

La emoción que le dio leerla, le quitó el sueño.

Comenzó a ver mejor la carta, como una fangirl. La caligrafía era hermosa, y sus firmas aún más.

Paso casi toda la noche pensando en eso, hasta al fin quedar completamente dormido.

A la mañana siguiente, comenzó su día como comúnmente, solo que ahora se sentía un poquito tímido ante Black.

Este no le dijo o hizo nada, lo que agradecía.

Después de ese día, las cosas cambiaron drásticamente para Goku. Zamas solía saludarle más amablemente cuando lo veía, Black perdió considerablemente su reputación de bullie, y Zamasu le daba una sonrisa cada vez que raramente lo veía. Además, las cartas llegaban con el pasar de los días. Lo mejor de todo, es que las cartas anónimas desaparecieron, dándole más paz a Goku.

La actitud de Goku cambio considerablemente. Se le veía más feliz.

Ya Goku, dime, ¿Qué te paso para que te vieras más animado? —

Nada, ¿Qué crees que me pasó? —

Hmm, déjame adivinar...—lo analizó unos segundos— Ya sé, ¡Estas enamorado! —

...—

Omg, ¿¡Estas enamorado!? ¿De quien? ¿Como se llama? ¿Qué edad tiene? ¿Le gustas? ¿Cómo empezó? —

𝐓𝐡єι𝐫 𝐌α𝐝𝐧є𝐬𝐬 - ᵇᵏDonde viven las historias. Descúbrelo ahora