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Me senté en el único asiento libre en la clase, llegué un poco tarde pero para mi suerte el maestro de historia todavía no había llegado. Extrañamente siempre me gustó la escuela. Los niños eran unos gilipollas, pero el aprendizaje era agradable. Supongo que podrías decir, soy una nerd, una friki, una perdedor, lo que se te ocurra.
Me senté al lado de Sally en la clase de historia, fue muy amable conmigo a pesar de lo que los otros niños decían de mí. Los adolescentes pueden ser muy crueles a veces, y en verdad duele, realmente duele, pero simplemente los ignoro. (o lo intento)
Interrumpiendo mis pensamientos el maestro entró y comenzó con la lección de inmediato.
- Hoy empezarán el trabajo que mencione la semana pasada. Y va a ser en pareja. ¡No quiero quejas, que ya los conozco muy bien! ¡Lo tienen que entregar antes de que termine la hora, así que ya se pueden poner a trabajar! - Terminó de explicar y repartió los papeles para empezar.
Como dije antes, me senté con Sal, lo que significaba que estaríamos trabajando juntos. Qué vergüenza, sáquenme de aquí.
- Supongo que estamos juntos. - Sal se volvió hacia mí, con el lápiz y papel en la mano. Asentí con la cabeza y comencé a leer silenciosamente el párrafo que nos asigno el profe.
[...]
- ¿Quién luchó en la guerra de 1812? - preguntó Sal, la confusión era evidente en su voz. Me di cuenta de que Geografía e Historia no era su mejor asignatura. Escribí la respuesta en un trocito de cuaderno y se la mostré.
El resto de la clase pasó más rápido de lo que yo pensaba. Sal y yo terminamos nuestro trabajo y lo entregamos. Para ser sinceros; Sal apenas sabía ninguna respuesta, pero afortunadamente estaba yo para ayudarlo. Soy bastante buena en historia y no me molesta hacer (casi) todo el trabajo, e incluso si Sal no pudo ayudar, sé que quería hacerlo.
- Oye Reader, lo siento. No te ayudé en prácticamente nada, soy malísimo en historia y no sabía ni la mitad de las respuestas. Perdóname. - Se disculpó. Le doy una mirada diciendo "Está bien". Y por la forma en que se movía su "máscara", me di cuenta de que estaba sonriendo.
No sé por qué usaba una máscara, pero supuse que era una prótesis, o tal vez simplemente odiaba su rostro y una bolsa de papel no le quedaba bien. Quien sabe, para gustos los colores.
Salimos de clase en silencio hasta que habló
- ¿Quieres almorzar con nosotros? - Asentí con entusiasmo. Me dio una risa suave, caminamos hasta su casillero. Después de guardar sus libros, me indicó que le diera los míos. Ladeé la cabeza confundida. - Para que no tengas que ir al otro lado de la escuela. Te los devolveré después del recreo. - Asentí, dándole mi libro y mi cuaderno. Los metió con sus cosas, cerró la taquilla y fuimos a la cafetería.
