Abeille d'anniversaire

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Marzo del 2020



Faltan pocos días para mi cumpleaños y no tengo ni idea de cuál es el plan, probablemente visitar a mi papá para estar el domingo en la noche a más tardar en Maranello.

Todavía me estaba adaptando a lo distinta que era la fábrica en vacaciones y ya con el calendario corriendo, el gran premio de Australia había sido increíble, o eso es lo que cuentan los chicos del equipo de marketing que viajan a cada uno de ellos.

Me conformé con ver a Seb en el podio en Bahrein, se lo merecía y todos aquí éramos conscientes de eso, Charlie había asegurado la cuarta posición, por lo que no habíamos empezado mal el año.

Mi teléfono suena y lo descuelgo sin ver el identificador.

"¿Hola?" Escucho el zumbido de una abeja, o mejor dicho la imitación de una y sé de quién se trata. "Hola, abejita."

"Hola Bee, ¿cómo te preparas para esos 24?" Jadeo al escucharlo.

"¿Cómo...?"

"A Charles se le salió, pero no lo regañes, sólo estábamos hablando de lo especial que eras para todos en la escudería y hablo justamente de eso, de tus cumpleaños en la fábrica."

"Lo siento, prefiero simplemente no celebrarlo, es sólo un día más..."

"¡No, abejita! Es especial, es tú cumpleaños, son 24 horas dedicadas a ti."

La realidad es que odiaba mi cumpleaños, nunca fui de muchos amigos, por lo que normalmente los celebraba con mi entorno, lo cual me deja con mi papá y mis hermanos. En la escudería solían hacer un agasajo, pero era básicamente apegado a lo laboral, por lo que al terminar el día simplemente estaba con papá y los chicos.

No sé qué tenía que espantaba a las pocas amigas mujeres que había tenido a lo largo de mi vida, siempre había algo, mi papá un día me dijo que estaban envidiosas de mi, que era la niña que ellas querían ser.

Muy dentro de mí también estaba envidiosa de ellas, al llegar a su hogar, o en la noche, siempre habría una mamá esperándolas, para peinar su cabello y contarle alguna historia de su vida antes de convertirse en madre.

Papá lo había hecho todo, inclusive sobrellevo de forma espectacular mi primera menstruación, Fabricio me consoló cuando desperté asustada de una siesta y había sangre en la cama, no entendía qué estaba pasando, Renato por su lado simplemente se burló durante unos días, hasta que papá lo amenazó con contar hasta que edad mojó la cama, pues decía que lo mío era algo que no podía evitar que sucediera, tarde o temprano pasaría.

Yo no tenía una mamá que me indicara a qué edad debería depilarme, o simplemente cómo saber cuando un chico me coqueteaba desde la perspectiva de una mujer, porque para papá era todo lo contrario.

Básicamente me encerré en sí misma, y eso incluye cumpleaños, san valentín y cualquier fecha tentativa en la que podía salir con alguien.

"Pierre, no es necesario."

"Tienes razón." Hice casi un puchero aunque él no me podía ver. "Antes no lo era, pero ahora que me tienes en tu vida sí que lo es."

"Pie..."

"¡NO! Sé que no quieres nada grande pero igual haré que sea especial, así que no te niegues, sólo disfruta."



···


𝗕𝗲𝗹𝗹𝗶𝘀𝘀𝗶𝗺𝗮 | 𝗣𝗶𝗲𝗿𝗿𝗲 𝗚𝗮𝘀𝗹𝘆Donde viven las historias. Descúbrelo ahora