¿Una diosa enamorada?

Carta Aether.

Querida Ei.

Tienes razón, muchas lunas pasan entre nosotros sin que nos escribiéramos y no me malentiendas, hace mucho que quería escribirte y hace mucho que la vida no me deja.

Tampoco mentiré, te extraño.

También, no te diré gracias por aceptar mi decisión que por lo que se, no lo hiciste, solamente, no te deje con otra opción mas que aceptarla. Se que la odias, pero espero a que a mi, no me odies.

Respecto a tu frase, no es que no te quiera a mi lado, verdaderamente, deseo que estés a mi lado, lo suficientemente cerca para poder abrazarte y quien sabe, quizás mas que solo abrazarte.

Y Ei, astuto de tu parte de no darme las respuestas a tus preguntas. Cuando te vea, cuando el mundo se apiade de nosotros y podamos estar juntos, te sacare esas respuestas y tal vez algo mas.

Pero dejando de lado mi cursilerías como tu dirías, el porque no te deje una carta y el porque no fui el primero en escribir.

Porque no quería arrepentirme, quise huir y seguir mi viaje antes de recordarte otra vez y tirar todo por la borda para darme vuelta y volver a tus brazos.

Pero ¿A dónde huir? Tú llenas el mundo. No puedo huir mas que en ti. Debo decir, Querida EI, que me has malcriado y que también, puedo imaginar tu sonrisa al leer esto.

Ahora nada puedo ver sin pensar en ti, el sabor de los dulces ya no es lo mismo. Incluso, el color de mi mundo ahora es opaco, sin brillo y aburrido.

Avanzo como un muerto viviente, un saco de carne que tiene una misión ¿Huir? puede ser, pero no, mi misión ya la conoces. Así que debo avanzar, cuanto mas avance, mas pronto volveré a verte.

Si me extrañas que espero lo hagas porque yo sufro sin ti, mira la luna porque yo también lo estaré haciendo y si por casualidad vez una media luna es que esta sonriendo porque le conté de ti.

Se despide, Tu viajero.