Dia 12

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Me acerque al dojo y entre sin tratar de hacer mucho ruido.

Ella siguió en lo suyo, parecía muy distraída, de hecho se dio cuenta de mi presencia cuando volteó.

– Ranma – dijo

No tenía palabras, eso era más que claro.

– yo...

– Akane antes que digas algo, tengo que decirte algo... yo... hemos tenido problemas – admití – malos entendidos y puede que pienses que me desagradas, la verdad es que...

Fue entonces que mi corazón comenzó a latir tan fuerte, baje la mirada por un momento. Se que tenía que decir se lo, pero sentía que la voz se me iba.

– Ranma...

– Akane yo... no puedo – caí de rodillas – simplemente no puedo decir lo

– está bien – respondió

– no, no está bien, tienes que saber lo – la mire

Akane solo me sonrió, se arrodilló enfrente de mi.

– ya lo se tonto – respondió y me tomo las manos – yo también... – se acercó a mi poco a poco

– tú...

Apreté fuertemente sus manos, nuestras respiraciones chocaron, cerramos los ojos casi al mismo tiempo y por fin, como si fuera un sueño, pudo sentir sus labios.

De hecho puedo decir que no duro mucho, nos separamos como a los 5 segundos.

Abrí los ojos, Akane estaba roja de las mejillas, miraba al piso.

– Akane...

Por fin me miro, sus ojos brillaban con intensidad, incluso en ese pequeño instante se veía más hermosa, con las mejillas rojas y los labios levemente abiertos. Parecía un ángel.

– Ranma perdón...

– está bien... creo que...

– Ranma... no lo digo seguido, pero... me gusta estar contigo, eres muy valiente y jamás te das por vencido...

No tenía un espejo, pero juro que estaba muy sonrojado también.

– bueno tú eres igual, eres necia, pero debo mencionar que siempre me terminas sorprendiendo

Akane me miró sorprendida y me sonrió.

– ¿quieres entrenar conmigo? – pregunto

– claro

Después de eso, comenzamos a entrenar, de algún modo me sentía muy cómodo pero a la vez nervioso. Akane lo demostraba más, siempre que estábamos cerca uno del otro se sonroja y se alejaba con rapidez, me pareció tierno. De hecho debo admitir que me acercaba a ella a propósito, solo para molestar la >:)

Seguimos entrenando hasta que nos quedamos sentados.

– supongo que ahora debemos decir les a nuestros padres sobre esto... – dije mirando al piso

– si pero, creo que será mejor esperar – la mire sin entender – si se los decimos ahora, nos van a querer casar ahora mismo

– si, tienes razón

Hubo un silencio.
Debo decir que fue un poco incómodo

– Akane... creo que estoy confundido – ella me miró con atención – ahora... quiero decir... en cierto modo somos novios desde que nuestros padres nos presentaron oficialmente... y no hemos actuado como una pareja...

El diario de... ¡¿Ranma?!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora