14. Provocaciones

239 30 4
                                    

En ocasiones, cuando se veia al espejo nunca se reconocía como aquel que estaba reflejado, ni siquiera cuando utilizaba esos disfraces e identidades falsas, jamas se veia a él como tal, era extraño, habia veces en las que no sabia ni quien era la que el espejo reflejaba y otras, en las que todo tomaba un aire mas normal —si es que esa es la palabra indicada oara describirlo—, los últimos meses, desde que conoció de imprevisto a ese trío, las cosas comenzaron a tomar un ambiente al cual con seguridad podria llamar normal, se sentía en casa al estar con ellos, se habían convertido en su familia y eso llenaba a su corazon de dicha. Cuando Norman había cumplido nueve años, él le habia dicho a su familia de que al cumplir la mayoría de edad se iria de casa e iba a recorrer todo el mundo, en un inicio nadie lo tomo en serio, pero cuando el día llegó, la madre de Norman lo fue a despertar oara desearle un feliz cumpleaños, pero no había rastro del chico, se habia marchado por la noche, ni un adiós, tan solo una pequeña nota en la que se despedía de su madre. Pasaron dos años para que su auto se descompusiera camino a New Jersey en medio de la ruta sesenta, y de no ser por eso jamás en su vida hubiera conocido a los hermanos Sinclair.

Estos últimos meses la habia pasado increíble en compañia de esos tres, habia aprendido mucho de ellos y viceversa; con Bo preparaban y remodelaban algunos automóviles viejos, quedaban como nuevos, con Vincent tenía largas charlas acerca de cuql tema que salga, aunque el que mas hablaba era el pelirrojo, pero no importaba. Y por ultimo con Lester... Aun estaba trabajando su relacion con Lester, todo se habia tornado muy complicado con este asunto de la propuesta indirecta de que sean pareja, para el chico esto se veia como un amor imposible de cumplir, el rubio era como diez años mayor que él, ademas de que no veis la posibilidad de que este llegase a fijarse en alguien como él, Lester no era gay y Norman lo sabia bien, aun asi no perdía la esperanza de que existiera la minima posibilidad de que el rubio lo mirara con otros ojos, no solo amistosos.

Lo que el pelirrojo no sabía era que Lester pensaba prácticamente igual se cuestionaba acerca de la diferencia de edades, el que ambos eran hombres y demás cosas, desde miy pequeño su madre le habia inculcado la creencia de que estaba mal las relaciones entre personas del mismo genero, pero ahora cada que pensaba que estaba mal, le parecía tan estúpido, ¿que había de malo el enamorarse? Porque eso me estaba sucediendo von ese muchacho. Lo que su madre le había enseñado acerca del amor le importaba tres pepinos, lo unico que le importaba ahora era Norman, la felicidad y el bienestar del mismo, y es que jamas comprendería la razón por la que ese michacho se habia fijado en alguien como él. No tenia nada de especial, era tqn solo un hombre ordinario, sus hermanos eran los especiales, no él.

Le veía sentado desde el sillón de la sala, viéndolo cocinar, se notaba mas emocionado que habitualmente, bailaba o mas bien, movia sutilmente sus caderas de un lado al otro a la par de la musica de shake 2 y su canción Get get down, era hipnotizante su movimiento, al bailar a la son de la música, no sabía si era por la musica o por su forma de bailar tan sensual, pero, sintió cosquillas allí abajo y todos sabemos que eso no significa nada bueno, mucho menos en momentos como esté. Se intentó cubrir con una almohada y su chaqueta, pero sentía que sus accionar era inútil, el mover de las caderas de pelirrojo no hacia más que intensificar su problemita-Si no fuera hombre, ya le hubiera dado duro contra el muro-admitio Bo a su lado, y el comentario del mismo lo molesto en demacia. Pero no comento nada al respecto, sabia bien que lo estaba haciendo oara provocarlo, porque asi era Bo-Pero, ¿para vos eso no es un problema, verdad?

No podía argumentar nada ante eso, y es que ni siquiera sabria como responder a esa pregunta en un principio, no sabia si le gustaba Norman o no le gustaba, está situación era muy confusa para el pobre de Lester que era nuevo en esto del amor. Se fue de allí y se encerro en su habitación, que para su desgracia (o fortuna), compartía el mismo con aquel pelirrojo que se habia adueñado de sus pensamientos.

[...]

Su cuerpo era sacudido para un lado al otro, oía lejana la suave voz del chico. Y permaneció estático al ver tan cerca su cara de la suya, sintiendo mil colores subirse a sus mejillas, se alejo instantáneamente, bajo la curiosa mirada del joven, quien le sonreía con dulzura, y para Lester no habia sonrisa mas bella que lq de Norman, suena tonto lo se, pero esa es la realidad que vivía el rubio. Veía atento cada minimo movimiento que el joven hacia, y es que cada pequeño acto que este hacia le maravillaba, y ahora, quiza se le podria considerar un bobo enamorado-Prepare un poco de budin de pan-exclamo sonriente, enseñando el plato con el postre-, te vine a despertar para que pruebes un poco, no se si te guste, a tus hermanos no les gusto mucho que digamos, pero si a ti te gusta, con eso me basta-joder... ¿porque era tan jodidamente dulce y atento con él? No lo merecía, y aun asi el pelirrojo lo hacia, siempre con una calida sonrisa en labios. Una sonrisa que desde el instante en el que se conocieron este le obsequiaba; acepto gustoso el postre que le regalaba el joven, y se llevo una cucharada a la boca, sintiendo el dulce sabor a la miel- ¿Te gustó?

-Me encanta-murmuro, sonriendolé de regreso con una sinceridad pura.

Mentiroso, mentiroso ᴸᵉˢᵗᵉʳ ˢⁱⁿᶜˡᵃⁱʳDonde viven las historias. Descúbrelo ahora